Este fin de semana ha tenido lugar otra edición (la novena ya) de la Muestra de Cine Fantástico organizado por el canal Syfy. 17 películas en los Cines Callao, con sesiones Trash, especiales dobles de reposiciones fundamentales e incluso música en directo. Pero lo más importante, un festival de cine barato en unas fechas muy buenas para irse con los amigos a disfrutar de un salón abarrotado donde rodearte de los de tu especie y revivir un poco tu espíritu adolescente (inevitablemente por esta razón el Syfy huele un poco a gimnasio de instituto). Pero hagamos un repaso a algunas de las películas que hemos visto:
Hell: Una producción germana de 2011, dirigida por Tim Fehlbaum que propone un cinema veritè del postapocalipsis en tierra de fuego. La temperatura media ha aumentado más de 10 grados, lo que en muchas zonas condiciona a sus gentes una adaptabilidad muy difícil y, por supuesto, el bien más preciado será el escasísimo agua. Con paisajes evocadores, escenarios plausibles y situaciones muy descarnadas pero humanas a fin de cuentas es una película que no recomendaría ver sin un refresco en la mano. No hay noticias de difusión de esta película.
Stake land: otra gran fracasada comercialmente hace dos años en Estados Unidos es una pieza dirigida por Jim Mickle que combina el punto justo de parodia e hilarantes situaciones de power walking y punch lines tales como “Y de repente la paz de estas gentes se derrumbó de la noche a la mañana por un grupo de cristianos blancos satánicos” (cito de memoria). Es un disfrute ver fuera del Upper East Side al hermano gay de Serena Van Der Woodsen en Gossip Girl (Connor Paolo), pero el indiscutible gran personaje de Mister (Nick Damici) se convertirá el lobo solitario más gallo que habrás visto en mucho tiempo. Pequeño spoiler: en la maravillosa secuencia inicial hay momento divertido con un recién nacido.
Hobo with a shotgun de Jason Eisener es buena sin reservas. Rutger Hauer (uno de tus droides favoritos) hace de vagabundo bienintencionado que sólo aspira a montar su propio negocio de cortar céspedes cuando llega a una ciudad tan carcomida por la maldad que no le dejan otra opción que comprarse una escopeta y ponerse a pegar tiros. Hija de los tráilers falsos de Grindhouse (al igual que Machete) establece desde el principio sus intenciones de espectacularidad e irracionalidad mágico-simpática. La sala del Syfy aplaudiendo y gritando a cada rato dejándonos grandes imágenes para el recuerdo.
Atrocious es una de esas películas que habla de la diferencia entre homenaje y plagio, pero muy a nuestro pesar se queda sólo en la segunda categoría. No aporta absolutamente nada de original al género de metraje encontrado, y es un pastiche de REC, Paranormal Activity y El proyecto de la bruja de Blair. Simplemente mala.
Apolo 18 es sin embargo, otro metraje encontrado realizado con algo de acierto. Esta ficción de Gonzalo López Gallego traspasa la pantalla haciéndote en algunos momentos creer que lo que ves podría ser real. Geniales efectos de montaje (aunque me consta que a muchos les chirrió), una falsa fotografía setentera en un espacio en el que con sólo dos personajes, piedras y vacío espacial y un apoyo para creer en las conspiranoias combinará lo mejor de Alien con lo mejor del Proyecto de la Bruja de Blair.
Con The Woman (de Lucky McKee) la división de opiniones se estableció para saber si su descompensación continua entre el drama y el terror la congraciaban o desgraciaban. Durante un día de caza un cabeza de familia bien se encuentra en la selva una mujer salvaje a la que secuestra para reeducarla, o al menos esa es la excusa inicial. Una tercera parte de la que las dos previas no se conoce casi nada y que descoloca con sus interpretaciones morales a cada segundo. Por mi parte diré que no me lo tomé sólo como un feminismo mal llevado o una crítica a la sociedad burguesa americana con un montaje que abuse de la banda sonora (a lo Zack Snyder) sino como un ejercicio de revisión sobre la moral más que doloroso.
Ah, y no he visto Last day on Earth, pero con mucho que ver (y doble combo para los que hayan visto Melancholia) dejo esto aquí.
En definitiva, Syfy ha dicho “¡Marzo negro chúpate esa!” con este acierto de festival (lo atestiguan las entradas agotadas y el cine a reventar) que el año que viene con casi toda probabilidad repetirá éxito de afluencia.
Esther Miguel Trula