Un trabajo bien hecho

La mejor recompensa que puede tener un PEQUE, además del cariño, comprensión, que le pueden ofrecer sus papis, es un “BRAVO”, “FELICIDADES”, por el trabajo bien hecho. Al igual deben también, los maestros y educadores, en cumplir con éste papel.Desde bien pequeños estos angelitos deben saber, que toda tarea o actividad requiere un esfuerzo, y el esfuerzo es: “Empleo enérgico del vigor o actividad del ánimo para conseguir algo venciendo dificultades” –R.A.E.Los PEQUES necesitan que sus progenitores le demuestren y transmitan ese esfuerzo y empeño en la actividad o tarea que realicen.

Hacerles ver la ilusión que mostramos en la tarea y la inquietud que nos despierta la actividad, les hará esforzarse aún más.

Darle pequeñas órdenes sobre actividades correspondientes a su edad seria una buena y gran satisfacción de demostrar así que su tarea importa y a la vez él mismo verá su autonomía y disfrute en lo que hace.

1. Ordenar sus juguetes.2. Ayudar a poner la mesa.
3. Al llegar del Colegio que deje su mochila y ropa bien ordenado.
Por tanto es conveniente que los papis eviten el enseñar a sus hijos el camino fácil, evitar una personalidad débil. Demos ponerles metas alcanzables y que las cumplan. Marcarles un ritmo cada vez mayor de esfuerzo y dándoles a conocer que lo que realmente importa es la lucha con la que realizamos la actividad, para poder lograr nuestros deseos.

Debemos ofrecerles razones suficientes del trabajo o actividad que están en ello, de ésta manera despertaremos en los peques la satisfacción de UN TRABAJO BIEN HECHO.Siempre hay un valioso motivo que valga la pena para esforzarse, presentando asi algo positivo y necesario. La vida es una lucha continua y los peques deben de saberlo.