El espárrago es uno de los vegetales más antiguos que se han cultivado durante siglos debido a su sabor dulce y maravilloso, pero también gracias a sus grandes propiedades curativas que hacen que sea muy beneficioso para su salud.
El espárrago está lleno de nutrientes debido a que es una fuente rica en fibra, antioxidantes, aminoácidos, minerales (hierro, zinc, calcio, cobre, potasio, cromo y manganeso), proteínas, ácido fólico y vitaminas A, C, E, K y complejo B.
Además, el espárrago es un vegetal con un contenido calórico muy bajo – aproximadamente 30 calorías por 100 g de porción. Por esta razón, el espárrago puede ser una adición perfecta a la dieta si se tiene la intención de perder peso. ¿Por qué? Debido a que el cuerpo va a utilizar más calorías para digerir esta hortaliza que los obtuvo de ella.
El espárrago ofrece una mezcla única de fitonutrientes antiinflamatorios y una amplia gama de nutrientes antioxidantes que reducen el riesgo de problemas de salud crónicos (como la diabetes tipo II y enfermedades del corazón).
Debido a su alto contenido en potasio y fibra, este vegetal puede limpiar el cuerpo de las toxinas y agentes nocivos. Además, no contiene grasa, colesterol ni sodio, lo que colabora a su vez para mantener el cuerpo sano.
Gracias al contenido de vitamina B, junto con el ácido fólico, el consumo de espárragos logra controlar el nivel de azúcar en la sangre, disminuyendo el riesgo de diabetes y enfermedades del corazón. Además de esto, mantienen el sistema cardiovascular sano.