Revista Humor
Hoy es un viernes raro, raro. Las noticias llevan dándole vueltas a la nota de ETA sobre el "cese definitivo" de la "lucha armada" toda la tarde de ayer y la mañana de hoy. No hay periódico que no abra edición con la noticia, los comentarios, las reacciones, etc. Y yo, qué quieren que les diga, me alivia saber que lo dejan, pero me produce muy poca euforia tal anuncio.
Primero porque no me fío, una banda de asesinos y secuestradores de ideología totalitaria no es de fiar, la mentira y la propaganda son instrumentos naturales suyos que usan a mansalva. No me fío demasiado, pero si lo cumplen fantástico.
Segundo, ahora sólo les queda entregarse a la policía y entregar las armas para que no quede duda de que es verdad lo que dicen y que no anden las armas por ahí dando vueltas. Mientras eso no pase, me parecerá pura propaganda para favorecer la estrategia política de los "suyos".
Tercero, los "suyos" me dan miedo. En el "País Vasco" hay dos tipos de nacionalismo y ninguno me gusta. También en esto hay grados: El PNV al que siempre se ha etiquetado de "moderado" y de derechas, con el que se han entendido todos los partidos de ámbito nacional, siempre ha aprovechado el río revuelto para sacar ganancias como ellos mismos reconocieron alguna vez, no sé por dónde va a tirar, igual piensa que radicalizando su nacionalismo obtiene votos y ya sería lo que faltaba. Los otros, el mundo de Batasuna & friends, un nacionalismo sanguinario, totalitario y de izquierdas que ha utilizado la violencia y la intolerancia para conseguir sus fines, ellos no esperan ganar elecciones sino fundar un régimen de partido único, el resto al gulag. Con este panorama, entenderán que me alegre sin ningún entusiasmo.
Y como conclusión dos cosillas: el problema es el nacionalismo mezclado con la ideología base que da como resultado un totalitarismo excluyente en mayor menor grado y, por otro lado, los periodistas de trincheras cada vez me resultan más vomitivos...
Y para colmo han matado a Gadafi, ese dictador que ha adiestrado a terroristas de toda Europa y se encumbró al trono de los malos malísimos del ranking internacional y que, de repente, se hacía fotos con políticos de todo signo y viajaba por toda Europa. Nuestro particular "hijo de puta" en el norte de África y al que todavía lloran y defienden algunos de la izquierda española (no sé muy bien por qué... oh, wait...!). Descanse en paz, hubiera preferido un juicio con todas las de la ley.