Una antigua alacena para una cocina vintage

El reciclaje de nuestros viejos muebles de madera es, además de una forma de vida sostenible y natural, una magnífica oportunidad para darle a tu cocina vintage un toque de originalidad a un precio accesible. Hoy te explicaré cómo restaurar una antigua alacena de madera, de esas que nuestros abuelos tenían en sus casas para guardar los alimentos. Lo vintage está de moda, ¡colócalo en tu vida!

¿Qué necesito para restaurar una antigua alacena?

No hace falta ser un gran virtuoso del bricolaje para recuperar una antigua alacena de casa de tus abuelos y convertirla en un complemento vintage perfecto para tu cocina. Hazte con varias lijas de distinto grano, rodillo y pincel, pintura y masilla. Solo si la alacena está muy deteriorada necesitarás algunas tablas para sustituir los estantes que estén rotos.

Este mueble tiene mucha personalidad y dará un aspecto muy entrañable y coqueto a tu decoración. Además, encaja en muchos estilos: mediterráneo, rústico, shabby chic, sailor style o retro. Incluso, en estos tiempos de eclecticismo, puede ser un original punto de contraste en un estilo industrial o minimalista. ¿Nos ponemos manos a la obra?

Pasos básicos para restaurar una antigua alacena

¿Decidido a darle un toque vintage a tu cocina? Sigue estos pasos básicos:

1. Limpia bien la superficie de madera de la alacena. Desmonta los tiradores, bisagras y pomos para limpiarlos por separado con un producto adecuado para metal.
2. Lija toda la madera del mueble. Ayúdate con una lijadora eléctrica si la pintura está muy deteriorada, pues deberás pintarla totalmente de nuevo. Si algún punto está astillado o quebrado, trata de repararlo con masilla y lija la madera que sobresalga, tratando de disimular la tara lo máximo posible.
3. Sustituye las tablas rotas por otras en buen estado. Puedes sujetarlas con pequeñas escuadras a los laterales de la alacena.
4. Pinta todo el mueble con alguna pintura satinada lavable. ¡A mí me gustan mucho los azules!
5. Si te gusta el efecto anticuado, vuelve a pasar suavemente la lija por el mueble, haciendo más fuerza en los bordes y las zonas de alrededor de los tiradores, que deben mostrarse más desgastados.
6. Coloca los tiradores, bisagras y pomos, ya limpios e incluso bañados en algún esmalte metalizado si es necesario.

¡Ya tienes tu propia alacena totalmente restaurada por ti mismo! Tu cocina vintage tendrá el toque elegante y original que necesita para sorprender a tus invitados. ¿Te atreves a seguir estos consejos y contarnos el resultado?