Una bomba detonada este miércoles en un mercado de la capital pakistaní, Islamabad, ha matado al menos a 21 personas, dejando decenas de heridos, según las autoridades locales citadas por AP.
La explosión es el último de los ataques con bomba que sacuden Pakistán en medio de negociaciones entre el Gobierno y el movimiento radical islamista talibán. De momento ninguna organización terrorista se ha atribuido la autoría del ataque, mientras que los talibanes pakistaníes han negado a través de un comunicado estar detrás de la explosión.