El equipo del Curiosity ha encontrado un nuevo uso a la Mastcam.
Aprovechando los filtros para ver en el espectro infrarrojo cercano, la potente cámara del rover es capaz de identificar la presencia de algunos tipos de minerales hidratados.
Esta técnica ha sido utilizada para rastrear las inmediaciones del terreno donde se tomó la muestra procedente de la primera perforación.
Los distintos niveles de brillo han servido para comprobar un aumento de este tipo de materiales en las vetas que cortan las rocas de “Yellownife Bay”. Estos minerales se diferencian drásticamente de los arcillosos que rodean al rover.
La Mastcam puede usar esta nueva habilidad para rastrear objetivos relacionados con la antigua presencia de agua, optimizando el precioso tiempo de la misión.
Tener una cámara que rastree con antelación los lugares donde la habitabilidad del terreno pudo ser mayor en un pasado es una nueva arma que hay que aprovechar.
La semana pasada se demostró que la zona del cráter Gale fue apta para que la vida tuviera una oportunidad para desarrollarse. Los nuevos datos han sorprendido a los investigadores, la cantidad de materiales hidratados es mucho mayor que el esperado. Esto promete.
Fuente: página oficial del JPL