Ya va apeteciendo pensar en espacios abiertos, en calor, en el mar, en vacaciones y en vistas y casas de ensueño como la que os voy a enseñar hoy. Según la ví, me pareció que reunía todas las características para convertirse en la casa perfecta, donde vivir y disfrutar, tanto en su interior como en exterior, zonas cuidadas y pensadas para dar la bienvenida al verano y sentir todo lo bueno que el paisaje Andaluz en capaz de ofrecernos, porque Villa Mandarina, nombre que recibe esta fantástica casa, está ubicada en Marbella.
La luz y el sol, típicos de los pueblos de la Costa del Sol, invaden la vivienda llenándola de energía, a través de los amplios ventanales,y aportando una iluminación natural que recorre toda y cada una de las estancias de la casa, potenciando el blanco impoluto, color protagonista y que está presente en paredes, telas o muebles, e invitan a percibir los espacios con cierto grado de serenidad debido al equilibrio cromático obtenido.
Goza de espacios amplios, donde el color protagonista por excelencia potencia dicha amplitud y la luminosidad de los diferentes rincones, impregnando notas de frescura y pulcritud con su mera presencia. Se observan ligeros contrastes en negros o grises, fundamentalmente, a través del uso de ciertos detalles decorativos, encargados de poner la nota de color de forma discreta y aportando una agradable calidez.
Destaca la sencillez de líneas, tanto en cromatismo, como en líneas de diseño y complementos, donde apuestan por materiales nobles y combinan elementos modernos y novedosos con otros que presentan aspecto envejecido, como mesas recuperadas que tienen cabida tanto en interior como en exterior, contrastes que enriquecen y llenan de carácter los espacios, así como detalles étnicos muy representativos que confieren personalidad.
Los textiles son una nota clave, tejidos frescos, ligeros y vaporosos visten los espacios de forma delicada, los hacen acogedores y colman de sofisticación. Estas sensaciones se observan tanto en el salón, como en el dormitorio e incluso en el extenso patio que rodea la casa, donde se aprecian detalles como telas de tul, utilizadas para crear una zona más íntima y protegerla de la luz directa, sutiles detalles que saltan a la vita y hacen esta villa aún más espectacular.
Sus exteriores cuentan con vistas al mar, rodeados de naturaleza y vegetación, ambiente perfecto para relajarse y desconectar en cualquiera de las zonas que se distinguen, como la piscina de agua cristalina, una amplia mesa donde reunirse o una bonita zona chill out donde tomar algo fresco y estar a salvo del calor.
Un villa de diseño sencillo, bien planteado y con todo tipo de detalles que invita a disfrutar de los rayos de sol, la tranquilidad y un entorno privilegiado con todo tipo de comodidades. ¿Qué os ha parecido esta casa de tonos blancos y crudos? ¿Qué destacaríais de ella?
Podéís seguirme en Facebook / Twitter / Linkedin / Instagram.
Muchos besos!!!
Imágenes: Masfotogenica, 79 ideas.