Limpia, higiénica, recogida, ese es el efecto de la composición de esta fantástica cocina, que aunque no muy grande, es perfecta para este piso de 62 m². En realidad es muy básica, con los electrodomésticos estrictamente necesarios y un espacio de almacenaje de acuerdo con el resto del piso, pero es a la vez, elegante, moderna y funcional.
La parte superior está compuesta de una doble fila de armarios de color blanco totalmente cerrados y de forma cuadrada y un espacio con baldas junto a la ventana, esto hace la cocina luminosa y ligera, cumpliendo con su función de almacenaje pero sin agobiar el espacio visual, ya que el color se funde con el de la pared.
El contraste se lo han puesto a la parte inferior, en la que los muebles son gris oscuro bajo una encimera de mármol. Es en esta zona donde se esconde el lavavajillas y se ha instalado el horno en acero. Completan la cocina un mueble bajo – vitrina, donde se guarda la cristalería y porcelana delicada, la nevera empotrada en un hueco compartido con el armario del hall en la pared y la mesa de comedor de madera clara, que en ocasiones hará la función de isla de trabajo.
El resto del piso concuerda en formas y colores con la cocina, líneas rectas en los dormitorios sólo rotas por los detalles curvos del salón (sofá, lámparas y mesa de centro). A ver que os parece, a mí la cocina me ha conquistado ¡feliz martes!
Vía: Fantastic Frank