Arrancamos la semana, despues de un fin de semana agotador. Y ojala pudiera decir que se ha tratado de un fin de semana de fiesta, pero no… ha sido (y durante unos dias lo seguira siendo) un fin de semana de reformas de las que pronto os hablare, y sobre todo un fin de semana de trabajo. Unos dias en los que soñaba con un otoño romantico perdida en una cocina rustica y acogedora como la que vemos hoy en el blog. De esas calidas, en las que las sobremesas se hacen meriendas y en las que el olor y el calor no solo se consigue con las temperaturas, si no con la compañia y un buen menu.
Y es que hoy, sin lugar a duda, os traigo un espacio unico y lleno de tales detalles decorativos que valen la pena descubrir.
Molduras clasicas, tejidos naturales y hasta combinaciones mas modernas en acabados que rara vez vemos en un interior hogareño.
Y ese es el Keplan, o suelos de fibras sinteticas que mas se utiliza en espacios publicos, y que sin embargo, visto aqui, en ese toque natural, le aporta un toque diferente, calido y distinguido.
Todo un acierto.