Y entre tanto usuario y tanto tuit, es necesario ir creando más y más usuarios????
Me hice esta pregunta hace unas cuantas semanas al leer que la Sociedad Española de Medicina de Familia y Comunitaria (SEMFYC) había decidido "dinamizar sus canales digitales" creando nuevos perfiles en redes sociales. La noticia decía textualmente:
"...nuevos perfiles de la semFYC en Twitter: uno internacional y otro de atención al socio. El primero de ellos ya se puede seguir, @semfyc_int, es un nuevo canal dirigido a la comunidad internacional de especialistas en Medicina de Familia y Comunitaria. El de atención al socio, semFYC responde, llegará próximamente y estará dedicado en exclusiva a dar respuesta a las dudas de sus cerca de 20.000 socios y socias."
Analizando los perfiles que la SEMFYC tiene actualmente en twitter vemos:
- Perfil corporativo @semfyc: con 12.200 seguidores
- Perfil internacional @semfyc_int con 156 seguidores
Pon un hashtag en tu vida
Ahora bien, a nivel corporativo, donde el tono y los contenidos son otros, os aseguro que no es tan sencillo "tener algo que decir cada día". Es asequible retuitear contenidos de otros, e incluso fácil si tienes bien identificados referentes e influenciadores del sector en el que te mueves, pero tuitear contenidos propios ya cuesta un poco más (hay que tenerlos). Si además quieres opinar y/o crear opinión eso ya es mucho más difícil (debes conocer temas y el entorno, sin olvidar que en este caso mejor que lo hagas desde dentro de tu Organización que con una empresa subcontratada, pero éste es tema para otro post).Por todo ello, una cuenta, otra cuenta y aún otra cuenta más en una misma organización tienen, a mi entender, bastantes inconvenientes:
- La fragmentación de tu audiencia: seguidores que "se pasan" a la nueva cuenta que parece más atractiva y los pierdes de la cuenta principal.
- La falta de contenidos para todos los perfiles: para uno es difícil, para dos ya cuesta bastante, a partir del tercer perfil vamos a ser los reyes del retuit o a tuitear en el modo cuentagotas.
- Sudor y lágrimas para conseguir seguidores: parecía que con la cuenta corporativa teníamos una buena audiencia y ahora, con la nueva los seguidores llegan muy lentamente e incluso no llegan y conforme pasan las semanas el perfil no despega.
- La endogamia del retuit: si tenemos varias cuentas hay contenidos válidos para todas y al final podemos estar retuiteándonos en modo bucle propio.
- ¿Quién administra las cuentas? O tenemos muchas personas para llevar los perfiles o si la misma persona los lleva todos, en poco tiempo, los tuits confluirán unos con otros.
Y llegaron los hashtags, el # que nos permite agrupar conversaciones. Y, aquí quería llegar yo, no es más sencillo, más útil y más participativo usar etiquetas en lugar de cuentas (que morirán demasiado pronto, seguro!!!). Si usamos hashtags podemos entablar múltiples conversaciones, con múltiples usuarios sobre múltiples temas clasificándolo todo con ese "cuadradillo" mágico. Si lo hacemos así economizaremos esfuerzos, no atomizaremos a nuestra audiencia e incluso, podemos crear tweetups/tweetchats para acalorados, intensos e enriquecedores debates.
Así, pues, pon un hashtag en tu vida y déjate de crear fantasmas digitales!!!!