La escasez de personal cualificado lleva tiempo identificándose como uno de los grandes problemas a los que se enfrentan las empresas.
Las empresas españolas viven desde hace años un problema que se acentúa cada vez más: la falta de ciertos perfiles que necesitan cubrir. La realidad de este panorama es que, para ciertos sectores, oferta y demanda siguen sin encontrarse 100 % y hay regiones e industrias en las que hay mayor déficit de talento que en otras, según la naturaleza de su economía y mercado de trabajo.
En Castilla-La Mancha, por ejemplo, una de las posiciones más difíciles de cubrir actualmente es la de instalador electricista, pero también la de carpintero de aluminio, metálico y PVC, conductor-operador de grúa, deportista profesional y entrenador deportivo. Una demanda que se repite en las cinco provincias.
Las empresas españolas viven desde hace años un problema que se acentúa cada vez más: la falta de ciertos perfiles que necesitan cubrir. La realidad de este panorama es que, para ciertos sectores, oferta y demanda siguen sin encontrarse 100 % y hay regiones e industrias en las que hay mayor déficit de talento que en otras, según la naturaleza de su economía y mercado de trabajo.
En Castilla-La Mancha, por ejemplo, una de las posiciones más difíciles de cubrir actualmente es la de instalador electricista, pero también la de carpintero de aluminio, metálico y PVC, conductor-operador de grúa, deportista profesional y entrenador deportivo. Una demanda que se repite en las cinco provincias.