Título: Una educación
Autora: Tara Westover
Editorial: Lumen
Número de páginas: 472
ISBN: 9788426405166
Precio: 22 €
Puntuación: 8,5
Nacida en las montañas de Idaho, Tara Westover ha crecido en armonía con una naturaleza grandiosa y doblegada a las leyes que establece su padre, un mormón fundamentalista convencido de que el final del mundo es inminente. Ni Tara ni sus hermanos van a la escuela o acuden al médico cuando enferman. Todos trabajan con el padre, y su madre es curandera y única partera de la zona.Tara tiene un talento: el canto, y una obsesión: saber. Pone por primera vez los pies en un aula a los diecisiete años: no sabe que ha habido dos guerras mundiales, pero tampoco la fecha exacta de su nacimiento (no tiene documentos). Pronto descubre que la educación es la única vía para huir de su hogar. A pesar de empezar de cero, reúne las fuerzas necesarias para preparar el examen de ingreso a la universidad, cruzar el océano y graduarse en Cambridge, aunque para ello deba romper los lazos con su familia.Una educación es la biografía de Tara Westover, aunque también podría ser una novela fantástica por la cantidad de cosas que pasan, y lo loco que resulta pensar que todo esto es una historia real.
Este libro nos cuenta de primera mano la infancia de la autora, Tara. Ella nació en una familia de mormones fundamentalistas en Idaho, en la que su padre lleva la voz cantante. Su padre es un hombre que desconfía del gobierno, que piensa que se acerca el fin del mundo y por ello dedica gran parte de su tiempo a envasar comida y esconder armas para cuando esto pase. Tampoco confía en los médicos ni en la escuela, por eso sus hijos se educan en casa y no van nunca al médico. Vamos, os podéis empezar a hacer una idea del tipo de vida que ha llevado la autora, pero de verdad que no os vais a imaginar hasta que punto es surrealista hasta que leáis el libro.
De verdad que parece increíble pensar que todo esto pasa, y pasa en nuestro mundo y en nuestro tiempo. Tara vive en una casa donde el cabeza de familia es un hombre que tiene algún tipo de bipolaridad, paranoia o esquizofrenia -nunca se le ha diagnosticado, así que no se puede saber con seguridad-. Tiene que trabajar con su padre y sus hermanos en una especie de chatarrería o desguace, y de verdad que es un misterio cómo han conseguido llegar a la edad adulta, teniendo en cuenta la cantidad de accidentes que tienen. Y sin ir al médico. Porque sé que esto es una biografía y que pasó de verdad, que si esto fuera una novela, no me creería que Tara y sus hermanos puedan seguir vivos a día de hoy.
Por si esto no es suficiente, Tara también tiene que lidiar con su hermano mayor, Shawn. Shawn es, en pocas palabras, un maltratador con todas las letras, en negrita y subrayado. De verdad que vais a flipar con este individuo.
Sin embargo, una de las cosas que más me gustan de Una educación es que no todo es blanco o negro. Por supuesto, la infancia de Tara fue muy dura y un auténtico locurote, pero también en ella estuvo muy presente el poder y la belleza de la naturaleza y de lo salvaje. Su hermano Tyler o su abuela son vínculos positivos para ella, que la ayudan a encontrar el camino -incluso su madre, aunque sólo al principio del libro-. Sin intentar justificar los aspectos negativos, la autora tampoco duda a la hora de enseñarnos las cosas buenas de su vida tan peculiar, y no es, en absoluto, un libro que tenga un tono triste o que se recree en la tragedia. Y podría hacerlo perfectamente, porque tiene material de sobra. Pero no es el caso.
Como se dice en la propia sinopsis, gracias a su propio esfuerzo y a su enorme capacidad de superación y de autoaprendizaje, Tara consiguió ir a la universidad, graduarse y quedarse como profesora en Cambridge, nada más y nada menos. Todo esto habiendo estudiado por su cuenta y sabiendo que la educación que recibió en casa fue de lo más pobre. Guau. La educación de Tara desde el principio está en conflicto con su familia y sus valores. Tara se encuentra dividida entre ambas cosas: entre quién es ella realmente y quién quiere ser, y el pertenecer al lugar que la ha visto crecer. Esta división tiene mucho peso en la historia y, como pasa en la vida real, no se resuelve de forma fácil ni feliz. De hecho, tampoco se podría decir que llegue a resolverse en algún momento.
En resumen:Una educación es una historial real que os dejará con la boca abierta y que no se os olvidará fácilmente.La vida de Tara Westover está llena de conflictos y de violencia,pero también de naturaleza, de autosuperación, de esperanza y de mantenerse fiel a uno mismo.Lo recomiendo totalmente.