El fotógrafo Nick Olson y la diseñadora de moda Lilah Horwitz construyeron, en 2012, su propia casa en las montañas de Virginia Occidental. Como buenos artistas, decidieron que su casa debía responder a sus visiones artísticas y a un estilo de vida en permanente búsqueda y creación, y por esta razón se propusieron juntar una gran cantidad de ventanas recicladas con las que construyeron la fachada principal de la vivienda.
Se trata de un espacio muy pequeño, y su objetivo fue siempre el de abrirlo al máximo hacia las puestas de sol y el cielo estrellado, convirtiéndolo en un marco único.
Las ventanas las consiguieron haciendo un viaje desde Pennsylvania, recogiéndolas en ventas de garaje y tiendas de antigüedades. Una semana más tarde llegaron a Virginia y construyeron la casa en el lugar donde se conocieron.