Este ano somos tan importantes que ven celebrar o noso 3º cabodano o mesmísimo Papa Ratzinguer... ademais haberá hostias con chourrizo (que sóas non saben a nada) e viño de mesa. E teremos unha Foliada Retranqueira!!!
La revista humorística “Retranca”, publicación en gallego que sale desde el año 2007 sin ayudas ni subvenciones, ha sufrido un percance en su último número, dedicado a la visita del Papa a Santiago de Compostela. La portada, crítica con la visita de Benedicto XVI en la capital gallega, mostraba al Pontífice bajo una lluvia billetes y un titular que cifra su coste en tres millones de euros. Pues bien, Kiko da Silva, su director, acaba de denunciar el secuestro de este número. Un secuestro que no procede de una censura administrativa sino de la imprenta que debería imprimirla. La cabecera, que aglutina a los mejores profesionales del cómic gallego y cuenta, como autores invitados, a colaboradores de la revista “El Jueves”, no podrá salir a la calle porque dicha imprenta se ha negado a entregar los ejemplares. “Pensé que estaban de coña cuando me informaron –dice Da Silva–. Pero no. Iban en serio. Es una censura indignante y delirante”.
Fue el dueño de la imprenta en donde suelen imprimirla quien informó a su director que no le entregaría los ejemplares porque “moralmente, no estamos de acuerdo con los contenidos” y que “harían todo lo posible para que no viesen la luz”. Así lo explica Da Silva a quien aseguraron que “no iban a darle publicidad a este tipo de blasfemias”. De esta forma, con la portada del Papa, “lo más chisteable del momento”, Francisco Jiménez Godoy, dueño de la imprenta en donde “Retranca” se imprimía, en Murcia, dejó plantado a este ilustrador vigués, quien, probablemente, denunciará a la imprenta “por incumplimiento de contrato y por daños y perjuicios”.
En efecto, Jiménez Godoy se le plantó y explicó a Da Silva que la revista, aunque ya estaba impresa y lista para el envío a la distribuidora, no se iba a entregar porque estaba en total desacuerdo “con el ataque al Papa y a la Iglesia”. Hasta ese momento, “Retranca” no habían tenido problema alguno con las mofas de políticos, pero, al tratar el tema papal, su impresor, más papista que el Papa, no dudó en “secuestrarla“. Godoy se reafirma como católico, y, como tal, dice tolerar ciertos temas, con los que no se siente a gusto. Pero no pasa por otros, como el de crítica y burla de la Iglesia. Por eso, “cuando los artículos son totalmente desproporcionados y se meten de esta manera con el Papa, usamos nuestro derecho a no publicarlos”.
Es la primera vez que una imprenta, con un trabajo ya impreso y con un contrato de por medio, decide unilateralmente no entregar la publicación no por falta de dinero, sino alegando su disconformidad con los contenidos de la misma. El director de “Retranca” precisa que fue la imprenta la que acudió a su empresa para ofrecerse a imprimir la revista, sabiendo de sobra que se trataba de una revista satírico-política. De ahí que haya tomado las medidas contra los daños y perjuicios provocados por incumplimiento de contrato. Y haya acudido a otra imprenta para, en breve, imprimirla.