¿Una campaña vale una amistad?
Hoy debería escribir sobre el informe de la Alcaldesa de Lima Susana Villarán sobre la gestión de su antecesor y candidato presidencial Luis Castañeda pero ayer prometí escribir sobre los “seguidores” de PPK y es que ayer mismo tuve el disgusto de darme una vuelta por su página principal de facebook donde me di con la sorpresa de encontrar muchos escolares escribiendo, además encontré muchos jovencitos irrespetuosos que ante el primer disentimiento no dudan en proliferar los peores insultos y es que es así, la intolerancia se ha apoderado de los “seguidores” de PPK y esta intolerancia se está volviendo violenta y eso es preocupante.
Lamentablemente la estrategia en internet de PPK está desbocada, han basado está en la mitificación de la imagen de PPK, lo están convirtiendo en un ser omnipotente, en casi un pastor religioso del cual sólo emana la verdad y eso es preocupante porque genera fanatismo, ese mismo fanatismo que aún mentes débiles desbocan por Fujimori y que los ciegan a todo, ese fanatismo no es bueno, se vuelve intolerante y violento y eleva a un estado de divinidad al personaje.
No quiero imaginar a un PPK divino y creo que va por ese camino, ayer dejó a Toledo prácticamente con el brazo extendido, si a Toledo, al mismo que lo convocó como parte del equipo de gobierno de Perú Posible entre el 2001 y el 2006, aquel con el que eran grandes amigos y con el que hoy parece no existir más que indiferencia, una indiferencia consecuencia del mareo de la popularidad, basta ver su campaña publicitaria en internet, sendos videos demoledores, uno inclusive comparando a Toledo con Keiko Fujimori, ¿Se olvidó PPK que trabajaron juntos durante cinco años? ¿Se olvidó PPK que ese señor al que subestima hoy fue su jefe directo durante cinco años? ¿Es qué la sed de poder puede eliminar amistades de un sólo porrazo? ¿Es esa la calidad de ser humano que idolatran las huestes de PPK en internet?
Lo mismo que se vive en la campaña es lo mismo que se ve en su página de facebook, la misma violencia, los mismos ataques, la misma subestimación, la misma alabanza divina de quien califican como un ser humano intachable que paradójicamente manda al traste una amistad sólo por la sed del poder.
Veo que la campaña electoral se va a tornar violenta e intolerable, llevar a casi un estado de fanatismo religioso a sus “seguidores” es preocupante y más preocupante es ver a toda esa masa de menores de edad metidos ahí comportándose como un barra brava cualquiera, no sé si sus padres sepan de eso ó quizás ellos mismos los han sometido a este mundo.
PPK habla de cambio pero predica más de lo mismo, está bajando el nivel del debate, está rompiendo amistades, se están volviendo intolerantes, ese no es el cambio que el Perú necesita, eso es regresar a los tiempos de los búfalos apristas ó de las violentas portátiles izquierdistas de los 70′s ó las de Fujimori.
Lo más preocupante es que casi todos los medios contribuyen a ensalzar a PPK, por ejemplo en las últimas encuestas fueron él y Ollanta quienes incrementaron sus índices de popularidad pero sólo se habla de PPK, de Ollanta nada, sólo los que tenemos acceso al twitter sabemos algo de él pero en los medios nada, ¿A qué se debe esto? Quizás al viejo cliché colonialista de estigmatizar a la izquierda y Ollanta la representa ahora ó quizás el temor de los grandes grupos de poder económico quienes ven con temor el crecimiento sostenido de Ollanta, como sea, eso no es democrático, eso es manipular la información para que se duerma el avance de Ollanta ó para no ver en la final una segunda vuelta entre dos cholos: Toledo y Ollanta.