Una isla de cocina improvisada

La cocina es uno de los espacios más importantes de la casa, ya que además de utilizarla muchas veces como lugar en el que comemos, también es un espacio de trabajo. Y para cocinar y desempeñar cualquier actividad propia de una cocina, es necesario que el espacio esté bien organizado, distribuido y ordenado en función de las necesidades propias de cada casa.
A la hora de decorar una cocina las posibilidades son infinitas… Todo depende del estilo, el espacio, los gustos y las necesidades de cada uno. Sin embargo, desde hace algún tiempo se ha extendido la tendencia de colocar una isla en la cocina. Y lo cierto es que, además de resultar una opción cómoda, práctica y funcional, aporta un encanto muy particular a la cocina.
El único problema de las islas de cocina es que es imprescindible contar con una cocina grande, o al menos con ciertas dimensiones. Aunque, ya sabes que en decoración siempre hay soluciones y, para esas cocinas que cuentan con poco espacio, hemos encontrado una solución ideal: convertir un carrito en una isla de cocina.
Esta idea permite contar con una isla de cocina improvisada que no requiere de complicadas instalaciones ni pesado mobiliario, ofreciendo las comodidades que puede ofrecer cualquier isla de cocina a la hora de trabajar en la cocina. Además, es también una alternativa bastante más económica. Y el resultado, lo puedes ver en la imagen que ilustra este post, es ideal.