Una Joyita: 'Freedom Wind' de The Explorers Club

Hay determinados artistas y bandas cuya música suele estar íntimamente ligada a cierto período del año. Esto no sé a qué se debe, pero lo que está claro es que el resultado de escucharlos en el ambiente propicio resulta como más placentero, completo o perfecto. Es algo difícil de explicar...
Voy a poner un ejemplo: En mi caso R.E.M es de esas bandas que aunque son habituales, sí es cierto que suelo poner de forma más reiterativa a finales de verano, justo cuando las fiestas de Alcalá se acaban y se nota en la piel y en el aroma del aire como los vientos frescos regresan de nuevo, anunciándonos con pereza que debemos volver a cambiar las camisas de tirantes por las cazadoras, las chancletas por los zapatos y los gazpachos fresquitos por esos cocidazos madrileños que es verlos y entrar el sueño más profundo...
Pero por ahora no tenemos por qué preocuparse: Como todos sabrán, los primeros días de verano ya están aquí, y han venido para quedarse un rato largo.
Últimamente por lo que he visto y leído, para mucha gente esta calurosa época es propicia para desempolvar unos cuantos discos de The Beach Boys, ponerlos a todo volumen y disfrutar de la playa, de las olas del mar y de los amores de verano... Podrá ser así, pero lo cierto es que de ser así me parece un desaprovechamiento musical: Los Chicos De La Playa suenan en mi habitación a lo largo de los 365 días que tiene el año, desde sus primeros discos hasta el fenomenal y nunca suficientemente alabado Pet Sounds... Apetecen siempre.

Pues bien, hace más un par de meses cuando todavía estábamos con el tiempo revuelto de fríos y de lluvias me topé con un grupito formado por chavales de veinteañeros que aunque provenientes de Carolina del Sur, parecen por sus trazas y gustos haber salido directamente de la mismísima California -siempre California- ya que el sonido que realizan, eminentemente marcado por Brian Wilson y compañía, así lo demuestra.
Esta banda, un sexteto bautizado con el curioso y sesentero nombre The Explorers Club podría haberse ganado la vida recorriendo los Estados Unidos de costa a costa como banda tributo de The Beach Boys repasando temazos como “Good Vibrations”, “Surfin´ Safari” o tantos y tantos otros. Hay mucha gente por ahí suelta que hace lo propio con figuras como Elvis, Frank Sinatra o los Beatles. Pero eso sería calcar, copiar, imitar o cualquier otro sinónimo que se os ocurra... Y la Historia no quiso deparar a The Explorers Club un futuro así.
Son muchas las bandas que reconocen abiertamente la impronta que dejó la familia Wilson, que afirman que gracias a ellos empezaron a tocar o que su música les debe mucho... Las formas para decir que son una gran influencia son incontables, pero lo cierto es que muy muy muy pocas bandas -por no decir ninguna- se han atrevido a emplear plenamente el lenguaje sonoro que dejaron estos californianos para la posteridad o a cantar con la belleza y el dominio que ellos tenían. Para ello hay que tener mucho talento y no es tarea fácil. Además, parte de estas bandas que nos venden desde los medios como “con raíces clásicas” y que intentan arropar ese clasicismo con moderneces o aditivos actuales, lo único que consiguen realmente es
desvirtuar el resultado final y tratar de disimular o encubrir su carencia de conocimientos y concepto.
Por poner un ejemplo en otro género que no sea el Pop: ¿Cuántas bandas intentan hacer algo similar en el terreno de Hard Rock teniendo a Black Sabbath como referente básico y no se acercan a ellos ni de refilón? La respuesta es que demasiadas ¿verdad?...
Pero The Explorers Club van de cara, dicen alto y claro que les gusta el sonido de esa época y en concreto de The Beach Boys, con esos juegos y coros vocales, con esas armonías y melodías. Y así, como si se tratara de un estilo o género musical más, lo han desarrollado y ampliado con nuevas composiciones propias, fenomenalmente trabajadas y tan pegadizas como las de Brian.
Ahí está el verdadero mérito del trabajo de esta gente.
Es entonces cuando se ve que The Explorers Club sí ha dado ese paso adelante. Se atreven a recoger el testigo y emplear legítimamente ese lenguaje sonoro propio de los playeros para hacer nuevas canciones, aunque todas basadas en lo que hoy día debería mover al mundo: El amor.
Y lo cierto es que esto no es nada criticable, en absoluto. No se les puede tachar de simples "recreadores de un sonido o una época" porque realizan temas originales y de nuevo cuño, y tampoco se les puede calificar de banda "revival" ya que en mi opinión este tipo de bandas no proponen nada nuevo, son estériles, repiten y repiten sin parar canciones ya escritas sin proponer nada distinto. Serían como las bandas tributo de las que hablé antes.

Y es que ese es uno de los puntos fuertes de The Explorers Club, porque decidme… ¿Cuántas bandas jóvenes de línea clásica que conocéis pierden fuelle y no poseen el atractivo y el hechizo si las comparamos con los grandes clásicos? Pues tengo que contar que en este punto nuestros amigos se salvan de la quema y puede que lo que diga a continuación sea una exageración, pero como exagerar no es un delito, ahí va: Si las canciones pertenecientes a su primer, titulado 'Freedom Wind' y publicado en 2008, hubieran sido incluídas a modo de Bonus Tracks como canciones inéditas en los discos legendarios de The Beach Boys, no chocarían lo más mínimo.
Así de buenos son.
Tal y como dice la compañía discográfica de The Explorers Club, este álbum está compuesto por "canciones nacidas para ser single". Con ello no sólo se refieren a que las canciones a duras penas llegan a los tres minutos, sino a que son composiciones que están construídas con talento, buscando siempre la elegancia, el cuidado en sus arreglos y que tienen un gancho Pop realmente encantador.
Como muestra de lo dicho ahí tenemos este "petsoundiano" tema, "If You Go" :

En directo estos tipos se desenvuelven bastante bien y suenan más potentes y eléctricos -en Youtube hay una versión del Johnny B Goode que tela-, pero ahora vamos a ver al Club de Exploradores desnudos. Es decir, en acústico:

Y como aquí siempre vamos al revés del resto del mundo, no nos despediremos con la canción que cierra el disco ¡qué va!, sino con la que lo abre. Es un tema perfecto para introducirnos en el mundo de la banda, de los más playeros y clásicos que hay en su repertorio y se titula "Forever" :

Definitivamente, estos exploradores van a sonar mucho en mi equipo de música durante este verano… ¿Qué sonará en vuestra casa?