Hola a todos, de nuevo, ¿cómo está yendo el inicio de este caluroso verano? Aquí en tierras alicantinas estamos en plena ola de calor, así que ya podéis imaginar el calorcito que estamos pasando... pues bien, con estas altas temperaturas vengo a enseñaros nada más y nada menos que mi última manta ¡DE LANA!... jajaja sí, así es, acabo de terminarla contra reloj (ahora os contaré por qué), por eso he estado un tiempito desaparecida del blog, pero aquí estoy de nuevo. Os cuento... hace un par de meses, allá por finales de abril, justo al terminar la manta de Súper Mario Bross, comencé a tejer una nueva en punto zig zag, por el capricho de aprenderlo. Los colores que quería utilizar eran estos
Pero cuando fui a la tienda no los encontré por lo que tuve que adaptar un poco mi idea sobre los colores que iba a usar, como veréis, la elección tampoco estuvo desacertada.
Cuando llevaba tejidos unos diez centímetros, de repente una idea apareció en mi cabeza no sé de qué manera, quizá porque se acercaba el fin de curso y un grupo de mamás de la clase de mi hija había comenzado los preparativos de la graduación de primaria... el caso es que pensé "esta manta la voy a hacer para Julia, la maestra de Elena, seguro que le gusta". Más que una idea fue una intuición, casi un sentimiento... Julia es una maestra extraordinaria, no tengo pudor en decirlo alto y claro. Ha tratado con cariño a mis dos hijos y les ha ayudado a crecer como personas y, además a tener gusto por aprender y por ser curiosos. Es una persona que no tiene ningún problema en contar cuánto aprende de sus alumnos. Más de una vez le he escuchado contar la anécdota de cómo no supo responder cuando mi hijo Juan en plena explicación le pregunto "Julia, y los árboles de hoja caduca, ¿cómo realizan la fotosíntesis en invierno?" y ella no sabiendo qué contestar, le dijo "Juan, lo voy a investigar, investígalo tú también y en la próxima clase lo hablamos". El caso es que el curso terminaba y yo quería regalarle la manta antes de las vacaciones, no quería dejarlo para luego, y esa es la razón de que no tenga apenas fotos del proceso, porque he estado tejiendo como una loca para terminarla, como os digo, contra reloj. Ha valido la pena, ¿no os parece?
Como remate le hice un borde sencillo, rellenando los huecos que hacía el zig zag con el tono verde del resto de la manta, más una fina línea marrón, recogiéndola en su totalidad.
¿No os parece que este punto recuerda a las olas del mar?
Como la he tejido tan deprisa, no fue hasta el final, cuando la puse sobre mi cama para fotografiarla, que me di cuenta de que es realmente bonita, una "señora manta". Junto con ella le escribí una carta de agradecimiento por los años compartidos, pero eso queda para ella... La manta mide 138 x 160 cm, incluyendo el borde, y para tejerla he utilizado dos ovillos de lana Katia, modelo Fama. En un par de colores he tenido que comenzar un tercer ovillo, aunque he utilizado poca cantidad de lana.
Estoy segura de que la apreciará, y aunque ahora hace demasiado calor, cuando llegue el frío, la utilizará, y nos recordará con cariño.
Tengo pensado escribir el tutorial de esta manta para dentro de poco, ya que el lugar de donde lo he cogido estaba en inglés, por si alguno os animáis a hacer algo parecido. ¡Ah! y por supuesto queda pendiente algún futuro proyecto con los colores que os enseñé al principio, seguro que en algún sitio los encontraré y ya veré qué hago con ellos... seguiré pensando en ello...