Una Merkel

Tranquilos, no estoy contando Merkels.

Ayer me puse tranquilamente a ver una antigua película de James Stewart de los años 50. Estaba relajado y en absoluta calma, pero cuando todavía no habían transcurrido ni cinco minutos del film y todavía estaban pasando los títulos mi corazón dio un vuelco y toda mi relajación y calma se tornaron ansiedad y nerviosismo. En la pantalla había aparecido el nombre de una de las actrices secundarias, era UNA MERKEL, la señora de la siguiente foto

Por lo que me he podido enterar Una Merkel fue una actriz que triunfo repetidamente en Broadway, pero que en Hollywood, desde los años 30 a la segunda mitad de los 50, nunca pasó de secundaria. Probablemente si, haciendo honor a su apellido, se hubiese dedicado a películas del oeste, con mucha guerra, muchos tiros, estampidas y masacres,  habría triunfado también en Hollywood.

En conclusión, la Merkel actriz se dedicaba a hacer películas con las que nuestros padres y abuelos se divertían, mientras que la actual, cada vez que sale en la pantalla del televisor nos provoca cabreo, aumento de la presión arterial y aceleración del ritmo cardíaco, y encima ya ni tan solo nos permite ver tranquilamente películas de los años 50. El refranero siempre tiene razón, cualquier Merkel pasada fue mejor o nunca segundas Merkel fueron buenas.

Por cierto, si alguien quiere pasearse pisándole el nombre a Merkel, Una Idem tiene una estrella en el Paseo de las Estrellas en el 6320 de Hollywood Boulevard en L.A.