UNA NUEVA SEMANA, UNA NUEVA OPORTUNIDAD (y II)

Sigue…

Pero es verdad que no es siempre y en todo momento posible la felicidad! ¿O sí lo es? Quizás deberías empezar por ahorrarte ese sufrimiento gratuíto que aprendiste sin darte cuenta y que aceptaste y convertiste en un mal hábito en tu vida! Sí, muchos de nosotros lamentablemente fuimos programados para sufrir… gratuitamente! Y, sin sentido, ese sufrimiento es vano e inútil! Quizás ahora serás capaz de asumir que sufrir demasiadas veces depende de ti! Y, de paso, que dejar de sufrir también es un primer paso para ser feliz! Porque ser feliz no es más que ser consciente de lo que tienes y eres, usarlo siempre que puedas a tu favor y, si es posible, en favor de los demás, de la gente que quieres y que te rodea…

Una vez sustituído el sufrimiento inútil por esa sensación de gratitud, la felicidad estará más cerca tuyo! Solo debes pensar en lo que tienes, más que en lo que te falta en tu vida! Siempre hay cosas que desearíamos ser, sentir y tener, pero tal vez no ha llegado su momento! Quizás porque no estaríamos preparados para valorarlo, tal vez porque la vida tiene otros planes para ti o quizás porque no hiciste nada para merecértelo porque no pusiste todo tu empeño en ello! Y allí, en esto último, es donde empieza tu responsabilidad! Si cada día te esfuerzas más en ser tú mismo, en sentir lo que sientes y en aplicarlo en tu vida cotidiana, poco a poco vas configurando la vida que siempre soñaste a tu alrededor! Día a día, así puedes ir modelando tu propia vida, tal como lo deseas!

Y ese es otro paso necesario hacia la felicidad! Dejar de sufrir y, a la vez, decidir ser feliz! Dicen que la suerte es la combinación entre la preparación y la oportunidad! Si la preparación la haces cada nuevo día que llega, solo tendrás que esperar a que la vida te brinde la oportunidad! Y llegará, no lo dudes… solo tendrás que estar bien atento! Porque quizás la felicidad siempre estuvo en tu interior y no supiste verla cerca tuyo, quizás no estabas suficientemente preparado para acogerla o tal vez aún no había llegado el momento más adecuado para vivirla! O sea que todo lo que necesitarás -una vez estés y te sientas preparado para acogerla y compartirla- sea confiar en ti mismo tal vez por primera vez en tu vida, confiar en la vida y dejarla fluir tal como llega, hasta que te aporte todo eso que realmente necesitas para ser feliz, aunque no siempre coincida con lo que tú crees! Cuando la encuentres en algunos rincones de tu día a día, lo sabrás… tu corazón te lo dirá, hazle caso y compártela!

¿Y por qué no empezar a caminar hacia tu felicidad decidida y firme, en un día como hoy, sea el que sea?

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