No he podido ver hasta ahora la nueva película de la franquicia jurásica, aunque he de reconocer que para mí no era especialmente deseada desde que vi el primer trailer y más o menos percibí por dónde iban a ir los tiros. Desde su estreno las redes sociales y la blogosfera echaron humo, pero yo como no podía ir al cine en ese momento no participé de nada de eso e incluso sólo lo observé lejanamente. Una vez vista voy a decir lo que creo, pero más como cinéfilo que como biólogo, porque si la biología es mi mayor vocación, el cine es mi gran amor. Y añado, Jurassic Park es de las películas de mi vida.
A la hora de valorar esta película hay dos maneras de actuar. Uno puede optar por compararla con sus hermanas anteriores, o uno puede seguir a los que dicen que comparar es un error por lo que hay que valorarla como si fuera una película nueva y aislada. Lo haré mezclando ambas posturas.
Todos estamos de acuerdo en que Jurassic Park fue una de esas películas que marcó a una generación y generó un boom mundial. Los efectos especiales eran espectaculares, la historia estaba bien construida, todos queríamos ser alguno de los personajes (muchas vocaciones de paleontólogo surgieron de este film), una banda sonora esplendida, la mezcla de acción, aventura, intriga, terror…era un todo. No recuerdo a nadie que dijera que era mala.
Su secuela me encantó y la disfruté en el cine, y también vi la tercera, aunque con el paso del tiempo ésta última me parece muy floja, con un final francamente lamentable.
Años después nos encontramos con Jurassic World, que repite aproximadamente el esquema de la primera parte, la homenajea gustosamente (posiblemente de lo mejor de la película) y nos pretende ofrecer un espectáculo de mayores dimensiones gracias a los efectos generados por ordenador y a las nuevas vías que tan empleada técnica ofrece.
¿Qué me ha parecido la película? Siendo lo más sincero que puedo ser me ha parecido de aprobado raspado y siendo generoso. El guión es muy flojo, tiene errores de lógica demasiado evidentes como para que no se hayan dado cuenta, los personajes en su mayoría son simplones, estereotipados y con frases muy peliculeras que aburren a estas alturas de la vida, escenas forzadas, un final que no deja un sabor de boca pleno y muertes que dan bastante igual. En la primera parte sentías que podía pasar de todo, sudabas, te asustabas, había escenas de tensión filmadas con buen pulso, frases memorables, todo daba sensación de estar pasando realmente, pensabas en la ciencia detrás de todo… en resumidas cuentas, era buen cine, cine de entretenimiento y algo más, como el que abundaba en los 70 y 80.
En esta nueva película ocurre algo muy habitual en buena parte de lo que vemos en la cartelera actual, te llenan de fuegos de artificio todo el metraje para no dejarte respirar, te entretienes gustosamente y sales de la sala habiendo pasado un rato ameno, pero al día siguiente ya no te acuerdas de nada de lo que has visto, porque no genera sorpresa ni fascinación, todo resulta previsible. Los personajes apenas producen interés, el debate científico está mucho menos conseguido (aunque creo que ni pretendían darle ese toque), se coman a quien se coman te da un poco igual, y los nuevos dinosaurios o lo que hacen con ellos es más ilusorio y no te lo crees como en las anteriores. Es más, creo que han intentado más descaradamente para toda la familia, perdiendo adultez y firmeza.
En la película la idea esencial es que la gente anda aburrida de los mismos dinosaurios y necesitan un nuevo estímulo para que los inversores de la empresa noten que la cosa va para arriba. A mi parecer lo mismo han hecho con la película, han querido hacerlo todo más grande y con más acción, para volver a gustar, pero se han dejado por el camino el gusto por el cine de entretenimiento que trata al público como ser mínimamente exigente.
Valorándola como película del año 2015 y olvidando que forma parte de una saga me mantengo en mi idea. No aporta nada nuevo ni revolucionario dentro del panorama actual, no destaca, es otra secuela, remake, reboot, o como quieras considerarla que hace taquillazo por la ilusión creada y porque vive de las rentas de lo que supuso Jurassic Park, pero por ejemplo este año han sacado una nueva de Mad Max y su visionado resulta más llamativo, o el reinicio de la saga de El planeta de los simios.
Los efectos especiales a veces cantan por bulería y a veces convencen, pero en ningún caso tuve la sensación de estar viendo seres vivos creíbles, algo que sí consiguieron las anteriores, donde no se recurría tan gratuitamente a los CGI. Veo la primera parte hoy en día y aguanta sin envejecer demasiado pese al paso del tiempo, me creo que son animales y me creo todo lo que pasa, pero veo Jurassic World y no veo que marque diferencias ni como película del año 2015 ni como película en general.
En resumen, no me arrepiento de haberla visto, pasé un rato ameno, pero no es ni de lejos una película buena ni va a estar entre mis favoritas de los últimos años.