Revista Atletismo
Algunos están en Gata de Gorgos, otros en Valencia (por cierto, ¿cómo le habrá ido a Paco el Maratón de Valencia y su reunión con Rita Barberá?)... al final todos disfrutando de nuestro deporte favorito. Los menos, nos quedamos en casa buscando la preparación para objetivos mayores. Son las 8,30 del sábado y allí están Marga, Ito, Nacho, Salva, Julio, Ginés y yo dispuestos a devorar el sendero de la Sierra de Santa Pola. Agradable sorpresa la de contar con un nuevo, que no principiante amante de este mundo: Ginés de Las Bayas se ha apuntado a este barco y muestra buenas maneras. Nos dice que corre desde hace un año y se va a Mallorca en Abril a terminar un ultra de 100 kms; desde aquí le deseo la mejor de las suertes. Espero que coincidamos en alguna nueva ocasión. Al finalizar nuestro entrenamiento se quedó con ganas de hacer una distancia mayor y eso me dice que fondo no le falta. La mañana soleada fue excepcional para correr entre pinos y sin dejar de mirar a nuestros pies llegamos al mirador del faro. Resultó agradable recordar con mis colegas de lujo las experiencias pasadas: Botamargues con Salva, MiM con Ito y La Sagra con Nacho. Ninguno me indicó que no quisieran repetir estas vivencias y apuntaron por vernos en el trail de La Mitja Lluna, esa prueba que todo apunta que sea algo digno de vivir. En la zona de los fosos antiaéreos, Ito nos animó a cruzar el túnel que los une. Con la luz de un móvil y algo de "cague" todos le seguimos... y es que no todo es correr. Al final un nuevo récord que pulveriza Marga... han sido 17 kms sin pestañear y con ganas de seguir.