Revista Cultura y Ocio

Una santa anti-ratas y pro-gatos

Por Santos1

Una santa anti-ratas y pro-gatosSanta Gertrudis de Nivelles, abadesa. 17 de marzo, 10 de febrero (invención de las reliquias) y 30 de mayo (traslación de las reliquias).
Su vida se escribió a raíz de su muerte, por un canónigo anónimo, del mismo monasterio donde Gertrudis vivió. Otra vida fue escrita por Rinchin, que la conoció personalmente, por lo que los datos primeros que de ella se conocen son fidedignos, amén de las leyendas posteriores que se le añadieron.
Fue Gertrudis hija del Beato Pipino de Landen (21 de febrero) y Santa Ithubergis (8 de mayo), y hermana de Santa Begga (17 de diciembre) y San Grimoald (16 de septiembre), este muy poco santo, la verdad. Santa Aldegundis de Maubegue (30 de enero) y Santa Waltrudis de Mons (9 de abril) también fueron parientas suyas. Cuando Gertrudis tenía 10 años, el rey Dagoberto I propuso a Pipino, gobernador de palacio, casarla con un noble franco. Gertrudis, que ya deseaba una vida consagrada a Dios se negó rotundamente, incluso ante el rey, que la llamó a su presencia para intentar convencerla, sin lograrlo.
En 646 muere Pipino, e Ithubergis construye el monasterio de Nivelles, bajo la dirección y apoyo de San Amando de Maastricht (6 de febrero y 15 de mayo) adonde se retiró junto a su hija Gertrudis, a la que cortó el pelo en una ceremonia pública, para remarcar su pertenencia a Dios. Era un monasterio mixto, con su sección para canónigos que cuidasen del culto y la predicación, bajo el mando de la abadesa, con una regla común a hombres y mujeres. Ellas eran canonesas, mujeres con una regla y vida en común pero sin votos perpetuos. Algunas entraban solo un tiempo a la comunidad, salían para casarse, o algunas viudas, junto a sus hijas para vivir una vida más recogida, siempre pudiendo salirse. además, la abadesa tenía poderes de jurisdicción canónicos y civiles.

Una santa anti-ratas y pro-gatos

Reliquias de Santa Getrudis en Nivelles.

Ithubergis murió en 652 y le sucedió en el gobierno Gertrudis. Fue ella quien comenzó el esplendor que este monasterio tendría durante siglos. Reformó la regla, introdujo el estudio, solemnizó el culto litúrgico y dotó de varias reliquias y ricos ornamentos la iglesia monástica. Abrió un colegio para niñas y un hospital y para pobres, mendigos y peregrinos. Pero sobre todo se esforzó en la formación de las religiosas, incentivando el estudio de las sagradas Escrituras (ella misma aprendería casi toda la Sagrada Escritura de memoria), los Padres de la Iglesia, filosofía y teología, música, medicina, etc. Por su medio otros monasterios copiaron su estilo de vida, y su obra llegó más lejos. Contribuyó a la construcción de otros hospitales y centros de enseñanza, de varias iglesias y santuarios. Fue madre y formadora de apóstoles, pues en Nivelles y bajo su mano se formaron los santos misioneros San Fursey (16 de enero) y San Ultan (2 de mayo), que predicarían y fundarían monasterios en Irlanda y las tierras británicas.
Fue mujer muy espiritual y penitente, aspecto que destacó más luego que ya cansada y enferma, pasara el mando del monasterio a su sobrina Santa Wolftrudis (23 de noviembre), hija de Grimoald, a la que desde años había preparado para ello. Una vez libre del mando, vistió con una túnica de crin de caballo, se puso un velo desechado por otra monja y se dedicó a la oración y la penitencia constantes.
Sintiendo su muerte cercana, Gertrudis envió a uno de sus canónigos a Fosse, a pedir a San Ultan consejo para afrontar la muerte. Este, luego de hacer oración le envió esta respuesta: "Mañana, durante la santa misa, Gertrudis, la esposa de Jesucristo, partirá de esta vida, para disfrutar de la que es eterna. Dile que no tema, porque San Patricio, acompañado por los ángeles, recibirá su alma en la gloria". Efectivamente, el 17 de marzo, memoria de San Patricio y segundo domingo de Cuaresma, de 659 falleció, con solo 33 años de edad. Sus reliquias se veneran aún en el monasterio de Nivelles, uno de los lugares matrimonales más importantes de Europa.
La leyenda de los ratones.
Una santa anti-ratas y pro-gatos
Como en buen santo medieval, no puede faltar la leyenda, y con esta santa hay varias, todas relacionadas entre sí, y con su protección sobre los viajeros y peregrinos. Ya en vida, se creó la costumbre de que los peregrinos bebiesen una copa de vino en honor de la abadesa antes de proseguir viaje. Luego de la muerte de Gertrudis y comenzando su culto, este beber a su salud, se convirtió en un signo de protección en el camino y más allá, como protección de las almas luego de la muerte hasta el cielo. Se convirtió en la santa especialmente protectora de los difuntos. Ser devoto suyo garantizaba la entrada al cielo luego de tres días. Al primero acompañaba ella, al segundo San Gabriel Arcángel, y el último día se llegaba al paraíso. Como sea, esta copa en la que se realizaba el brindis se conserva junto a las reliquias y ha pasado a ser uno de sus atributos.

Esta creencia de su protección sobre los difuntos se fundió con la creencia precristiana teutónica que veía en los ratones como las almas de los difuntos, por lo que estos animales pasaron a la iconografía de Santa Gertrudis a partir de los siglos XII-XIII. Y la iconografía, como suele suceder dio paso a patronatos y otras leyendas y devociones: el agua del pozo de Nivelles se bendecía para combatir las plagas de ratas, se bendecían panecillos para alejarlas. Curiosamente, cuando la creencia pagana se perdió en el tiempo, una nueva leyenda popular dio sentido a los ratones presentes en las imágenes de la santa: estos subían y bajaban por su báculo pero ella estaba tan absorta en la oración que no los notaba. Otras dicen que el demonio, en forma de ratón, enredaba el hilo de la rueca para hacerla enfadar y pecar, sin conseguirlo.
Fuente:
"Vidas de los Santos". Alban Butler. REV. S. BARING-GOULD. 1916.

Volver a la Portada de Logo Paperblog