Revista Coaching

Una sola acción

Por Un Tipo Con Suerte @untipocnsuerte

Este miércoles quiero compartir contigo una idea que he visto en una película: Piratas del caribe. Aprovecho para decir que me encantó la primera parte y que creo que nunca debieron hacerse las dos siguientes. Especialmente el momento “Dalí” en que Sparrow está en una playa de piedras. Pero eso lo dejo para las críticas y críticos de cine.
A lo que iba. Al principio de la película, Jack (Deep) salva a la chica y ésta intercede por él para salvarlo de la horca. El oficial que lo tiene preso le dice:
- Una acción no sirve para redimirte de una vida de fechorías.
A lo que Deep le responde:
- Pero sin embargo sirve para condenar a alguien.
Esta tarde estaba con un amigo hablando de lo humano y lo divino. Él me contaba que cada vez está más desilusionado con la vida porque ve que no se puede fiar de nadie, que hasta la gente buena hace cosas malas. Y entonces me ha venido Jack Sparrow a la cabeza y he pensado: el pirata tiene razón.
Si has decidido ser un tipo o tipa con suerte  y has empezado con esto del buen rollo, te habrás dado cuenta de que hay mucha gente que está trabajando por hacer un mundo mejor. Seguramente habrás visto con otros ojos a esos curanderos kármicos. Al final parece que saben algo.
La verdad es que eso mola porque eres más sensible al buen rollo. Sin embargo, sin querer también te vuelves más sensible al mal rollo. Cada vez te cuesta más aguantar a los… digamos mal nacidos que hacen este mundo un sitio peor. Cuando ves, oyes o lees sobre alguno de estos individuos lo sientes como algo personal. Tú estás intentando hacer las cosas bien y esos tipos te fastidian el trabajo.
Como te habrás dado cuenta, esto no mola tanto porque no te sientes muy bien y, sin querer te vas convirtiendo en juez de los demás. Y así llegas al siguiente paso, juzgar las acciones de los demás. No sólo te molestan las malas personas sino las malas acciones de la gente buena. De hecho la gente se divide en buenos, los que lo hacen todo bien, y malos, los que alguna vez han hecho algo malo. Y de pronto una sola acción vale para clasificar a alguien como mala persona. Sirve para condenarlo.
Así que esta semana te dejo una idea. Una semilla para que madures y llegues a tu propia conclusión: ¿Una sola acción convierte a alguien en mala persona? ¿Puede alguien bueno equivocarse? ¿Puede equivocarse mucho, pero que mucho, y seguir siendo buena persona?
Quizás podríamos juzgar a las personas por lo que pueden hacer, bueno o malo, no por lo que han hecho. ¿Y si damos un paso más allá? ¿Y si no juzgamos?

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Dossier Paperblog

Revistas