Revista Cultura y Ocio
Hace semanas que os venimos hablando de la iniciativa delectura conjunta que Ediciones Traspiés me propuso a mí, y a cuatro blogs más. Trasel sorteo de dos ejemplares por blog, por fin ha llegado la hora de hablar de ‘Unasombra en Pekín’, una novela de José Ángel Cilleruelo e ilustrada por JuanGonzalo Lerma.
Cuando desde la editorial me propusieron participar en elsorteo, como blog organizador, y en la posterior lectura conjunta, no me lopensé dos veces. Gracias a Ediciones Traspiés he podido disfrutar de unahistoria diferente, de fábula y con unos personajes que al final nossorprenden.
‘Una sombra en Pekín’ es un relato narrado en primerapersona por un hombre cansado de caminar por la vida. Se para a contarnos unahistoria mientras la herida de su frente sangra, una herida que con el paso delos años no tiene importancia porque sufre de otras que son más profundas.Empieza a contarnos, como si de un cuento se tratara, la historia de su familia,dedicada al arte de afinar pianos. Su abuelo, su padre y más tarde él mismo,tenían unas manos prodigiosas, tanto, que pudieron dedicarse a ello y vivir holgadamentedurante años. Hasta que su suerte cambia y Sha Yú, que era quién vendía pianosen el pueblo, decide cambiarlos por los nuevos eléctricos, los que nunca sedesafinan. Entonces, ¿para qué sirve un afinador? Es así como nuestro protagonista decide ir a Pekín, a buscarsuerte y labrarse un futuro en la gran ciudad. No son pocas las dificultadespor las que tendrá que pasar y finalmente, se dará cuenta de que por mucho quese persigan los sueños, hay veces que se escapan.
Al llegar al final de este relato, nos daremos cuenta de quenada es lo que parece y que los protagonistas de esta historia, en realidad sonanimales, como en las fábulas que leíamos cuando éramos pequeños.
‘Una sombra en Pekín’ no es una novela al uso. No es unanovela donde haya protagonistas, una acción y un desenlace, las páginas delfinal no están escritas, no sabemos cómo va a terminar el viejo afinador, esosí, todo su relato sabe a derrota e intuimos que así es como termina, derrotadopor la vida que tantas veces es injusta con las buenas personas y permisivascon los que no lo son tanto.
Esta historia es una fábula en la que el tiburón representaa ese ser ambicioso que quiere más a cambio de menos. La tortuga, la paloma, laardilla… Cada animal (protagonista) tiene su papel en esta historia que notiene tiempo de acción definido y bien podría ser la historia de miles depersonas hoy en día, en un mundo deshumanizado y donde el dinero y la necesidadde sentirse alguien importante, priman.
La necesidad de emigrar hacia la gran ciudad para buscartrabajo, labrarse un futuro, la mano de obra barata o la mecanización deltrabajo, son temas que predominan en una novela llena de magia y casi oníricapor el mundo que nos recrea, tan alejado, pero a la vez tan cercano.
Con un lenguaje casi poético y unas magníficasilustraciones, José Ángel Celliruelo y Juan Gonzalo Lerma, nos introducen enuna historia que pese a tener poca extensión, es de las que se recuerdan y sequedan grabadas en la mente, por lo que son, por lo que significan. 10/10.