Hace tiempo os enseñaba como solía pasar mis mañanas, encerrada en mi mini estudio, actualizando el blog, editando fotos, contestando emails y un largo etcétera, si queréis lo podéis ver aquí. Las tardes ya son otro cantar, las dedico a tejer, mucho más relajada, sentada en mi sofá y viendo series a diestro y siniestro, con Sobras a mis pies durmiendo la siesta.
Ahora por problemas de salud me he tenido que buscar otro sitio para tejer, ya que al pasar muchas horas sentada en el sofá me estaba lesionando las lumbares y me había dado hasta la ciatica. Así que he encontrado un nuevo rincón para no estar sentada siempre en el mismo sitio. No quiere decir que a vosotros os pase lo mismo, ya vi que os alarmasteis cuando os lo conté por las redes sociales. Simplemente es que yo ya tenía la espalda algo dolorida y pasar 7 horas al día tejiendo en la misma postura no ayudan mucho.
Así que he aprovechado que tengo una mecedora que apenas uso, que es muy cómoda y además está al lado de la ventana, y la he convertido en mi nuevo rincón para tejer.
Y así entre punto y punto paso mis tardes, lástima que en breve ya no podré hacerlo. Pero bueno, los cambios siempre son a mejor, aunque eso ya os lo contaré otro día.
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