Por eso, que mejor manera que hacerlo desde un espacio tan bello como el que os traigo hoy.
Se trata de una preciosa vivienda en la otra punta del planeta, en Sydney (Australia) de la diseñadora de interiores Alice Flynn.
Un espacio donde se respira naturalidad, frescor un excelente gusto y equilibrio decorativo.
Basado en colores blancos, las piezas principales y los detalles decorativos giran en torno a la naturaleza.
Ramas de almendro, espejos con forma de hoja, o mobiliario en mimbre.
Sin duda, un espacio lleno de serenidad y con un equilibrio en su atrezzo.
Obras de arte y composiciones fotográficas que se conjugan y combinan con un gusto que me encanta.
Disfrutad de ella!!
Feliz Viernes.
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