Cuando hablamos de silicio, normalmente lo asociamos con un mineral en forma de piedra y poca cosa más. Es cierto que el silicio metalúrgico (como una piedra, vamos) se utiliza como materia prima en la manufactura de compuestos industriales, (siliconas, vidrios, aceites, etc..) pero el silicio orgánico (el menos conocido quizá) es un oligoelemento presente en el organismo, con destacables propiedades para la salud y belleza de la piel, cabello y uñas.
Pero eso no es todo:
Como he comentado antes, el silicio forma parte de los oligoelementos, es decir de los minerales que se necesitan se pequeñas cantidades en el cuerpo humano (micro-minerales), y se encuentra en todos los órganos y estructuras en que existen tejidos conjuntivos, entre los que cabe destacar: en los huesos, en la piel, en el cabello y uñas, así como en los vasos sanguíneos.
El silicio orgánico desempeña diversas funciones en el organismo:
Interviene en el crecimiento de los huesos, en la formación de los cartílagos.
Fortalece los dientes, las uñas y el cabello. (Pronto escribiré un post sobre la caída estacional del cabello)
Contribuye a recuperar la elasticidad de la piel gracias a su función favorecedora de la síntesis de colágeno.
Ayuda en muchas enfermedades cardiovasculares ya que mantiene elásticas las paredes de las arterias.
Puede retardar y contrarrestar los procesos de arteriosclerosis.
La cantidad recomendada de silicio diaria quedará cubierta mediante una alimentación variada y equilibrada en la que se incluyan hortalizas, frutas, cereales integrales y legumbres, (todos ellos ricos en silicio orgánico), por lo que no será necesaria una suplementación adicional a no ser que el médico o profesional de la salud lo recomiende por algún motivo específico (dolor articular, osteoporosis, caída de cabello, uñas frágiles, remineralización, etcétera).
Algunos alimentos ricos en silicio orgánico son: los cereales integrales (avena, arroz, cebada, mijo, etcétera) las patatas, la remolacha, la alfalfa, la soja, las legumbres y las algas.
Pero cuidado, una alimentación rica en azúcares refinados (azúcar blanco, bollería industrial, etcétera), alimentos envasados y hasta consumir una gran cantidad de productos animales (ojo con las dietas hiper proteicas) puede resentir el balance de silicio en el organismo.
El silicio a nivel externo se utiliza en productos cosméticos para ayudar a calmar el dolor y la inflación en quemaduras, llagas y/o heridas que cicatrizan mal, así como en algunas líneas de cosmética antiedad y/o reparadora de la piel, uñas y cabello (Pero ya hablaré de ello en otro post).
¿Y vosotros? ¿Conocíais las propiedades del silicio? ¿Coméis hortalizas, frutas y cereales integrales a diario?¿Tomáis mucho azúcar blanco? ¿Y alimentos precocinados? Estaré encantada de leer vuestros comentarios ¡!!
Besos desde mi blog!!!