Este verano ya pudimos ver cómo el “abuelismo” está más presente en los pies de nuestros modernos con gafas de “1,2,3 responda otra vez“. Pero llegan tarde, como siempre.
Hace unos meses, nuestros amigos de suelasdegoma.com hacían una referencia genial sobre la marca catalana maians, descubriéndonos la historia que había detrás. Lo puse en su día en facebook, pero para los despistados os ruego la obligada lectura.
Y para no quitar más protagonismo os presento esta cazada de unas maians en la calle Marina de Barcelona. ¿Quién las calzaba? Pues Samuel, un tío super majo y de lo más normal. Me explicó que lo que le llamó la atención de estas plimsolls era su olor de chicle y su embase en forma de tupper.
Como véis el zapaticonsejo del funambulista lo practico en mis cazadas, jejeje
Bambin@s, un respiro maravilloso a la “ola victoriana” que estamos sufriendo.