Por las dos máquinas mencionadas, parece obvio que nadie se puede esperar la sorpresa de encontrarse en estas condiciones una consola que haya tenido relativo éxito de ventas. Que nadie espere ver una SNES o Megadrive. Efectivamente si se puede conseguir una Turbografx o AMSTRAD GX4000 es, no nos engañemos, porque no tuvieron éxito alguno. Eso me da esperanzas de encontrarme por sorpresa algún día en condiciones similares alguna 3DO, Atari Jaguar, Philips Cdi o incluso un Amiga CD32 ¡de ilusiones también se vive!
¿Una consola que llegó demasiado tarde?
Un poco de historia
En fin, para ponernos en contexto hablemos un poco de la máquina que ahora mismo nos ocupa. La AMSTRAD GX4000 fue el primer y único intento de la compañía británica por internarse en el mundo de las consolas. No fue la primera ni tampoco la única que lo intentó y fracasó, pero si ha sido una de las únicas consola europeas. Ha habido alguna otra incursión también sin mucha repercusión como por ejemplo el intento de Philips con la Videopac G7000, que no era más que la versión europea de la Magnavox Odyssey 2, y una revisión mejorada, la Videopac+ G7400 que estuvo a punto de saltar al mercado norteamericano también de la mano de la marca Odyssey pero que fue finalmente descartada.
Pongámonos en contexto. AMSTRAD era muy popular en Europa, ordenadores como el Commodore 64 y el estándar japonés MSX no terminaban de cuajar en nuestro continente, si bien en alguna zona como Alemania o Dinamarca Commodore se encontró son su Oasis en medio del desierto, y el gran competidor no solo había perdido la guerra sino que los nuevos modelos de Spectrum ya se fabricaban por la compañía de Alan Sugar, con un primer modelo con un color grisáceo que, de hecho, parecía hecho para marcar el territorio antes de devolverles el clásico negro con el Spectrum +2
Así que, ahí tenías al mencionado Alan Sugar, prácticamente dueño y señor de la informática doméstica por nuestras cercanías, los juegos en casete y en disquete de tres pulgadas con su AMSTRAD CPC 6128 y el posterior Spectrum +3. En estas circunstancias pensó en asaltar otro mercado como era el de consolas. Tras la debacle de Atari, NES y Master System venían pegando fuerte y ya se escuchaban ecos de los 16bits de Pc-Engine y Megadrive, aunque Pc-Engine no era una 16 bits completamente y contaba con una CPU de 8 bits aún pero ya marcaba las diferencias con la competencia en el apartado técnico. Y aquí es donde sobrevino el primer fallo. Una AMSTRAD GX4000 alberga en sus tripas básicamente una versión consolizada del CPC+. Ciertamente tenía en general características muy superiores a las otras consolas de 8 bits: Una CPU Zilog Z80 a 4mhzs en una época en la que ese 0.5mhz con respecto a Master System era una diferencia palpable, 64kb de RAM y 32 de ROM, ¡¡una paleta de 4096 colores!! No ya es que Master System tuviera solo 64, es que incluso Megadrive podía echar mano de una cuarta parte, 512. Pero seguía siendo una consola de 8bits de principio a fin, basada en un ordenador con muchos años a sus espaldas, y eso se notaba. En un mercado en que NES y Master System ya estaban asentadas y las de 16 asomando la patita, no podías abrirte hueco con algo así. La gente no iba a cambiar su 8bits por otra 8bits, y si alguien quería comprar una consola sin tener ninguna no dudaba en irse a por las de SEGA o Nintendo con su amplísimo catálogo ya por entonces.
La caja impoluta de la consola
Si unimos todo esto con que no hubo realmente apenas software que aprovechase y mostrase al mundo sus capacidades, es normal que vendiese unas escasas 15.000 unidades en total entre los cuatro países en los que se puso a la venta. Y es que el propio Alan Sugar se ponía en evidencia delante de Geoff Brown de U.S.Gold como contó este segundo, al mostrar que no sabía siquiera qué juego era el famosísimo y preciado Out Run y que pensaba que tener cualquier juego de coches era suficiente. Y es que el escaso catálogo de la GX4000, alrededor de 30 juegos, se compone básicamente de los mismos juegos del CPC+ tal cual al compartir hardware interno. No olvidemos que incluso la jugabilidad entre las consolas y los ordenadores de 8bits distaba en muchos juegos, tal vez por el control tan distinto que se usaba. Los juegos de ordenador eran en algunos casos más toscos en su control y en ocasiones más lentos tal vez por esto mismo, porque la reacción que te permitía un teclado o aquellos rudimentarios joysticks, no era la misma. Y claro, el que quería acceder al catálogo de un AMSTRAD y veía la GX4000 con pocos juegos y además muy caros al ser en cartucho, y por otro lado podía adquirir un flamante CPC 6128 o CPC 464 con versiones de prácticamente todos esos juegos y a parte un inmenso catálogo y a mucho mejor precio ya fuesen en disquete o en cinta... pues la elección estaba clara.
Esto convierte hoy por hoy a la GX4000 en un objeto de puro coleccionismo. Hay máquinas como la NES o Master System que aún disfruto conectando y jugando, con alguna pequeña modificación para hacerlas multiregión, poder jugar a 60hzs y tener salida RGB en el caso de la de SEGA, pero queda muy claro de antemano que ese no es el caso de la consola de AMSTRAD a priori. Tiene juegos buenos y disfrutables pero poca cosa que no puedas encontrar en un CPC estándar a mucho mejor precio aunque, eso si, con la lógica mejora técnica en dichos juegos como veremos a continuación. En mi caso tan solo por eso hace que valga la pena tenerlo pero ya depende de cada usuario.
La sensación de abrir por primera vez la caja es incomprable, claro :)
¿Entonces solo sirve para tenerla como objeto decorativo? Tampoco es eso. Los juegos que salieron tienen las mejoras del CPC+ y si bien un CPC normal es fácil y barato de conseguir no tanto un CPC+. En un artículo de Deepfb podemos comprobar como las mejoras técnicas de los juegos con respecto a las versiones, digamos, normales, hacen que puedas querer tener dichas versiones. Pero no siempre es fácil conseguir cartuchos por lo escasamente vendida que fue la consola. Hay gente con maña que utiliza un programador pero sin el uso de un cartucho flash la labor está al alcance de unos pocos. Y el hecho de que sea una consola tan poco popular hace que uno no pueda esperar un “GX4000 Everdrive”. No obstante algo hay, pues parece que, por un lado, los chicos de Retrocables están en ello, y además es posible como comentan que se puedan cargar desde dicho cartucho los juegos de CPC que puedan aceptar directamente el tipo de controlador de la consola. En dicho momento, el valor como máquina de juegos de la GX4000 aumentaría exponencialmente, pero hoy por hoy quien la adquiera debería tener en mente únicamente ese pequeño catálogo disponible.
Por lo demás, no deja de ser especial para un coleccionista tener en sus manos un aparato que tiene tan poca gente en todo el mundo. Tan solo 15.000 personas en cuatro países poseen o han poseído esta rareza, hasta el fallido 32X de SEGA vendió 665.000 unidades en todo el mundo.
Primer contacto
Al tener la caja en las manos uno se da cuenta de que es bastante compacta, no excesivamente pero si lo suficiente para percatarse de ello. Me llama la atención una pegatina que incide en que no conectes el adaptador de corriente a la toma eléctrica sin tenerlo en la consola previamente, cuando veo una de estas cosas me pregunto qué habrá pasado para que se sientan en la necesidad de advertirlo.
Lo primero que vemos al sacar los corchos protectores son dos tarjetas: la de garantía y la de centros de asistencia técnica ¡a saber qué cara pondrían ahora mismo si les llamásemos con una consulta sobre la consola! Abro al fin los corchos y vemos todo muy recogido, incluso con bastante espacio de sobra en el lugar donde está el típico cable RF. La consola, muy pequeña comparada con Master System y NES aunque no llega al de Pc-Engine, viene encima del compartimento del adaptador de corriente y los dos mandos. Primera sorpresa muy positiva, que incluya dos mandos, ya que si bien había packs con juegos y varios mandos por aquel entonces, no era lo habitual en el mercado y el pack básico siempre solía incluir un solo controlador y a veces ningún juego. Ambos pads utilizan la norma Atari y son bonitos y cómodos, una suerte de fusión entre el de sus dos directas competidoras. También vemos el cartucho de juego incluido, el Burning Rubber, que también nos llamará poderosamente la atención por su pequeño tamaño. Y, por supuesto, tanto el manual de instrucciones del juego como el de la propia videoconsola.
¡Advertencia!
Es curioso como, al ver las instrucciones del juego, nos vienen a la memoria por su semejanza aquellas escuetas instrucciones de los casetes con la información más básica y, eso si, en varios idiomas. También en varios idiomas viene el manual de la consola y aquí, todo lo contrario al del juego, tenemos información bastante detallada con datos incluso de qué función desempeña cada pin en cada uno de los conectores de la consola ¡¡todo un lujo para los amantes de hacerse adaptadores!! Con esta información no debe ser nada difícil poder hacer adaptadores de otros pads a los de esta consola o de estos mandos a otros aparatos... Aunque seguramente ya serán compatibles por su propia norma con unos cuantos. Curiosamente en la portada del manual hay otra pegatina alertando explícitamente que conectemos primero el adaptador de corriente a la consola y solo entonces a la toma eléctica... definitivamente me pregunto qué debe haber pasado pero tampoco tengo el ánimo de probar si ocurre algo al conectar el adaptador en primer lugar a la toma eléctrica y luego a la consola.
Tercera sorpresa agradable tras el detalle de las instrucciones y el incluir dos mandos, la conectividad de la consola. En la parte frontal podemos apreciar una salida minijack destinada según el manual a poder sacar el audio por un sistema de sonido externo pero que es perfectamente funcional con auriculares. Tenemos también las dos entradas para los pads y entre medias una entrada para joysticks o incluso pistolas de juego. Es muy curiosa la entrada de la derecha, pareciera una entrada de red y seguramente no llegó a tener uso.
Conectores de todo tipo
Por la parte trasera nos encontramos también opciones y sorpresas. Al lado de la típica salida RF de antena hay una palanca para el audio que en mi caso no tiene efecto alguno, igual solo afecta a dicha conexión RF. En el lado opuesto tenemos dos tomas de corriente distintas según si vamos a alimentar la consola directamente o, junto con el conector adyacente, a un monitor AMSTRAD. Por último, en la parte central, a pesar de mi incredulidad, si, la consola incluye una salida euroconector que, además, es RGB. Lo de incluir salidas de vídeo estándar es poco habitual y como podréis imaginar, poder utilizar un cable RGB cualquiera facilita mucho la vida al amante del videojuego retro. En otros casos como Dreamcast toca buscar un cable específico que no venía con la propia consola y en muchos otros toca modificar el aparato si queremos tener la opción de vídeo con dicha calidad. Incluso la flamante 3DO de Panasonic, que si tenía salida de vídeo directa y estándar, utilizada RCAs que dan menos calidad que el RGB.
Conector RGB 'de serie'. No muy habitual para el año de slaida de la consola desde luego
Seguimos viendo cosas y nos percatamos de que en el adaptador a corriente hay, de nuevo, una pegatina con, si, lo habéis adivinado, una advertencia que nos incide de nuevo en conectar primero el cable a la consola y entonces a la corriente. De acuerdo, esto ya es raro, definitivamente no voy a hacerlo, pero si algún lector se anima que nos cuente si la consola implosiona o algo porque esto no es normal. Tras una consulta al compañero y experto en todo lo relativo a AMSTRAD, Chema, nos indica que, efectivamente, la insistencia en los avisos no es gratuita. El transformador de la consola parece estar mal diseñado y si llegáis a enchufar a la toma de corriente sin estar previamente conectado a la videoconsola... ¡el transformador se quema!. Es por eso que es fácil encontrar múltiples GX4000 de segunda mano a la venta sin el transformador.
No digáis que no hemos avisado...
En la propia consola tenemos un led de estado así como la palanca de encendido y un botón de pausa, todo muy bien integrado en la estética de la máquina. Estética muy particular, por cierto. Habrá a quien le repela y a quien le encante, yo me encuentro en este segundo grupo.
Y llegó el momento de conectarlo todo y por fin poner en funcionamiento la máquina. Aparece directamente la pantalla de juego instándonos a iniciar partida en solitario o a dobles. Antes de proseguir hacemos una pequeña prueba. Como tengo los euroconectores conectados a un concentrador que permite habilitar o desactivar el RGB según la naturaleza de la fuente, pruebo a desactivar el RGB para que se vea por el pin de vídeo compuesto en lugar de los 3 rojo, verde y azul. La diferencia de calidad de los colores es evidente como se puede apreciar en las imágenes adjuntas, pero lo que por desgracia no puede apreciarse pero se nota, y mucho, es la estabilidad de la imagen al existir como muchos sabréis, con el video compuesto, una especie de hormigueo bailón en los bordes de los objetos, que desaparecen para quedar todo perfectamente delimitado en el momento que activamos el RGB.
Todo conectado, ¡es hora de jugar leñe!
Nos ponemos al fin a los mandos del juego incluido para comprobar que, efectivamente, Alan Sugar estaba equivocado. No vale cualquier juego de conducción y, en un mundo en el que el marketing lo es todo, a “Burnin' Rubber” le faltaba nombre para atraer a la gente, si bien, como apunta el compañero Pedja, su demo en las tiendas de El Corte Inglés son culpables de la mayoría de las compras de una de las máquinas en las que corría dicha demo. He de decir que mi primera toma de contacto con el juego fue algo negativa por su inicio algo lento, falta de frames y control un poco duro hasta que te haces a él, y no fue sino por el propio Pedja que me decidí a darle una segunda oportunidad, que ahora puedo corroborar que es bien merecida.
Lo primero, un consejo, cambiad la configuración del pad que, por defecto, viene con la cruceta para acelerar y frenar viéndonos obligados a hacer diagonales de forma constante. Una vez cambiados para acelerar y frenar con los botones la jugabilidad cambia un mundo. Tampoco os dejéis desanimar por ese inicio algo lento pues una vez en marcha la cosa mejora sustancialmente. Una vez cogido el tranquillo al control y a una velocidad adecuada podemos ver un despliegue de detalles como un efecto de scaling bastante currado pudiendo ver no solo los típicos árboles y algunos carteles con el letrero de AMSTRAD u OCEAN sino incluso algunos retratos. El colorido superior de la gama CPC+ y por tanto de este AMSTRAD GX4000 se deja notar en los coches, carretera y escenario y no faltan detalles como cambios no ya día-noche si no de varios momentos con distinta iluminación, túneles, el humo al derrapar, los coches rivales en la cuneta soltando humo e incluso chispas si nuestro coche roza al de un rival o con las paredes del túnel de turno. Los rivales, ya que los menciono, no están ahí de meros comparsas y nos lo pondrán difícil siempre que tengan ocasión bloqueándonos el camino, tirándose directamente en trayectoria de colisión con nuestro vehículo o incluso juntándose entre varios para no dejarnos más remedio que frenar y salirnos por un lateral si no queremos saltar por los aires.
Vídeo compuesto...
... o calidad RGB
Me ilustra Pedja además, como buen admirador del juego, que “Burnin' Rubber” es una adaptación encubierta del arcade recreativo de Konami “Wec Le Mans”, que sí fue adaptado previamente a formato doméstico en 1988, dos años antes de la salida de este “Burnin' Rubber”, por prácticamente el mismo equipo desarrollador del juego que nos ocupa, con Jon O'Brien como programador principal en ambos títulos. La única diferencia estriba en Mike Lamb que se encargó de las rutinas de dibujado de pista en el juego original pero no formó parte del equipo del juego de Ocean y, tal vez por eso, hay quien dice que el “Wec Le Mans” de 8 bits es más ágil, rápido y posee una tasa superior de frames por segundo, aunque “Burnin' Rubber” sea muy superior visualmente hablando.En definitiva, una consola que es una rareza y poco aprovechada. Que como valor de coleccionismo hoy por hoy puede apetecerte tener y a la que podrás sacarle algo de provecho con algunos de sus juegos, pero que tiene como mejor alternativa directamente un CPC, aunque la salida de un cartucho flash que permite además cargar juegos de CPC cambia mucho la historia si alguien no quiere tener un CPC y además la AMSTRAD GX4000. Pero queda todo supeditado a la adaptación progresiva de los juegos de CPC para ser cargados en dicho cartucho.
A pesar de poseer un Amstrad CPC 6128, por mi parte estoy deseando tener un cartucho así en mis manos y que la lista de juegos de CPC adaptados crezca para poder utilizarlo en todos los juegos que me lo permitan, desde esta pequeña preciosidad con tan solo encender y listos, su salida RGB y sus pads.
No es OutRun pero mola
De acuerdo, pero ¿existirá dicho cartucho o es una leyenda urbana?
Respecto a esto, los chicos de Retrocables han tenido la amabilidad de contestar directamente unas cuestiones al respecto que aquí os detallo:
Retrocables: Respecto al cartucho flash, sigue en desarrollo, estamos contemplando cambiar de microcontrolador para facilitar el direccionado al grabar la flash ya que nos está dando problemas con los dos últimos bits.
RetroManiac: ¿Se podrá cargar más de un juego en memoria o será tan solo uno a la vez haciéndolo funcionar como un cartucho original?
Retrocables: En principio podrá flashearse con 4 roms seleccionables por un dip-switch.
RetroManiac: ¿El cartucho utilizará algún tipo de tarjetas de memoria como las típicas SD, o requerirá de conexión al Pc ya sea por USB o cualquier otro puerto?
Retrocables: Será vía USB.
RetroManiac: En tal caso, respecto al software necesario para comunicar el ordenador con el cartucho ¿qué sistema operativo será necesario?
Retrocables: En principio será para Windows y Linux en modo texto. Posteriormente sacaremos un front-end. Para Mac posiblemente se podría complicar sin problemas, pero no tenemos un Mac Intel para hacerlo, solo tenemos un Mac PowerPc.
RetroManiac: ¿Finalmente podrá cargar juegos de CPC? ¿Que restricciones al respecto habrá?
Retrocables: Habría que parchear los juegos previamente. Hemos estado haciendo pruebas ya que hay que meter parte de la rom del CPC en la rom del cartucho. Solo sería para juegos de 64k tanto de CPC como CPC+, ya que la GX4000 sólo tiene 64k de RAM.
RetroManiac: ¿Se sabe alguna fecha aproximada?
Retrocables: El prototipo final debería estar para Junio. Luego ya dependemos de la fabricación de las placas. Haremos una primera tirada junto al prototipo de 9 piezas para betatesters.
El botón de pausa en la propia consola a lo Master System
Más información
Aunque la escena de AMSTRAD no es tan activa como la de MSX, hay bastante información sobre sus máquinas y, en concreto, podemos acudir a la página que le dedican los compañeros de Retromaquinitas. Interesante es también visitar la página oficiosa que tiene la consola que nos ocupa, pues no por ser una consola poco habitual deja de tener su interés. En Amstrad.es tenéis no solo la historia de la consola sino unos útiles foros y una recopilación de 24 de sus juegos de lo más completa con imágenes, vídeos, carátulas, manual de instrucciones, y la propia rom del juego así como instrucciones para disfrutarla en un emulador. Si eres un manitas y tienes las herramientas necesarias, tal vez te animes a crear tu propio cartucho flash casero, puedes ver como hacerlo en CPCMania y, por último, si lo que te interesa es saber cuales eran los mejores juegos de la máquina, aquí tienes un TOP 10 bastante interesante.
Donde adquirirla
No es nada difícil conseguirla incluso completa y nueva. El haberse vendido tan poco hace que haya stock antiguo por ahí circulando. Pero tal vez hoy por hoy la mejor opción es acudir a Retrocables, pues por otras vías el precio suele rondar los 90-100€ con envío, tanto si la encuentras en España como si tiras de importación en cuyo caso el precio es más asequible pero el envío se dispara bastante.
Por: Juanma