Autor: Marcelo Bielsa Nacido en Rosario, Argentina, Marcelo Bielsa descubrió, casi a los 30 años, que su talento natural le daba más para ser entrenador de fútbol, que futbolista. Como jugador, había resultado ser un defensa central bastante mediocre, pero amaba tanto el fútbol que no podía prescindir de él. En sus primeros años como técnico ya adquirió el sobrenombre de 'Loco' por el que hoy se le conoce; alias con el que se denomina en Argentina a todo aquel que no transita por el mismo camino que los demás. Bendito apodo, por tanto.La filosofía vital de Marcelo Bielsa tiene su reflejo en su discurso inteligente, matizado, coherente, persuavivo, instructivo que siempre pretende inculcar a los jugadores y equipos que están bajo su mando.Estas son algunas de las perlas de su sabiduría, aplicadas al fútbol, obviamente, pero también de aplicación formal en la vida común:
- "Prefiero que nadie me conozca a que me conozcan equivocadamente."
- "La relación éxito y fracaso ha sido fundamental en mi vida, pero el éxito y la felicidad no funcionan como sinónimos."
- “Las operaciones y los cambios se hacen en la victoria, no en la derrota. La adversidad es el momento de observación de las cosas."
- "Un entrenador no es mejor por sus resultados ni por su estilo, modelo o identidad. Lo que tiene valor es la hondura del proyecto, los argumentos que lo sostienen, el desarrollo de la idea.”
- "Crear lo pueden hacer pocos, correr está al alcance de todos."
Bielsa también posee un parecer muy concreto sobre el modo en el que han de asumirse los fracasos. Toda una lección magistral para aquellos que creen que ganar lo es todo. "Los momentos de mi vida en los que yo he crecido, tienen que ver con los fracasos; los momentos de mi vida en los que yo he empeorado, tienen que ver con el éxito. El éxito es deformante, relaja, engaña, nos vuelve peor, nos ayuda a enamorarnos excesivamente de nosotros mismos; el fracaso es todo lo contrario, es formativo, nos vuelve sólidos, nos acerca a las convicciones, nos vuelve coherentes. Si bien competimos para ganar, y trabajo de lo que trabajo porque quiero ganar cuanto compito, si no distinguiera qué es lo realmente formativo y qué es secundario, me estaría equivocando."El actual entrenador del Athletic de Bilbao no concede entrevistas, pero sí ofrece numerosas charlas en las que expone sus criterios e inquietudes...- Sobre el afecto. "Como todo ser humano, lo que dice el futbolista es: 'Quiéreme de verdad. No solamente para que gane. Yo quiero que me quieras para poder ganar, no quiero que me quieras porque gané'.
- Sobre la resistencia. "La resiliencia es la principal virtud de un jugador. Es la virtud que tiene un cuerpo de recuperar la forma original después de haber sido deformado. Los grandes jugadores superan inmediatamente el dolor de la derrota o cualquier dolor que les produzca el juego".- Sobre el talento. "Los que tenemos que gobernar colectivos queremos que todos los jugadores sean iguales. Estamos en contra de los diferentes. Pero hay partidos de 0-0 en los que en el minuto 90 les pides a los jugadores: 'Inventen algo'. Y te miran diciendo: '¿Toda la semana uniformados y en el minuto 90 de un 0-0 inamovible hay que ser diferentes?'. Ahí empiezas a entender lo imprescindible del diferente. No basta con tolerar al distinto. Es indispensable respetarlo..."- Sobre las reglas. "Interpreto el reglamento como un arma que asiste al juego para que haya armonía y para que la dedicación esté puesta en tratar de superar al rival. El juego fue creado para superar al rival de acuerdo con la belleza de los elementos que tiene el juego y no para observar el reglamento buscando perfiles que nos permitan superar al rival, pero no con la legitimidad de la esencia del juego. La esencia del juego es el gesto al servicio de la belleza".- Sobre la emoción. "Siempre les digo a los jugadores que hay que estar 'cerca y dispuesto'. El fútbol es fundamentalmente un hecho activado por la emotividad. Todo esto se logra entrenándolo, pero no es necesario entrenarlo si los jugadores están entusiasmados. Estas cosas se hacen para cuando los futbolistas no tienen ganas".Frases para cambiar vidas