Revista Economía
Más de mil economistas han escrito a los ministros de finanzas del G-20 para instarlos a luchar contra los especuladores con la aplicación de una tasa a las transacciones financieras, la conocida "tasa Tobin" hoy llamada tasa Robin Hood. Los expertos de 53 países describen este impuesto como "una idea que ha alcanzado la mayoría de edad".
Entre los firmantes se encuentran Jeffrey Sachs, director del Earth Institute de la Universidad de Columbia, influyente asesor del Secretario General de a ONU, Ban Ki-moon, el economista de la Universidad de Harvard, Dani Rodrik, y Ha-Joon Chang, de la Universidad de Cambridge, entre muchos otros. La aplicación de un impuesto de 0,05%, podría recaudar cientos de miles de millones de dólares, que podrían invertirse en proyectos de desarrollo y ayudar a cubrir los enormes costos de la crisis que llegan a los 20 billones de dólares.
La actual crisis financiera ha demostrado los peligros de las finanzas no reglamentadas, y el vínculo entre el sector financiero y la sociedad se ha roto. Por eso ha llegado la hora de que el sector financiero devuelva algo a la sociedad y por eso el "impuesto Robin Hood" no sólo es técnicamente viable sino que además es moralmente correcto.
Ver: Tasa Robin HoodUna mirada no convencional al neoliberalismo y la globalización