En la esquizofrenia el grupo de
células nerviosas conocidas como el sistema de la dopamina, no funcionan
correctamente produciendo en el paciente hiperactividad trastorno de la cognición,
los movimientos y las emociones. Partiendo de esta situación el Centro de
Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas en San Antonio, Estados Unidos,
se planteo reemplazarlas. Los investigadores tomaron muestras de tejido de
fetos de rata y células aisladas del tejido. Las células madre son capaces de
convertirse en tipos diferentes de células, y en este caso se seleccionaron las
interneuronas. Las células fueron inyectadas en el hipocampo del cerebro de
ratas enfermas. El hipocampo regula el sistema de la dopamina y desempeña un
papel importante en el aprendizaje, la memoria, y funciones ejecutivas como la
toma de decisiones. El trasplante restauró en las ratas el funcionamiento
normal del hipocampo y del sistema de la dopamina. A diferencia de lo que
sucede con los enfoques tradicionales para tratar la esquizofrenia, tales como
la administración de medicamentos y la estimulación profunda del cerebro, el
trasplante de interneuronas podría, en teoría, resultar una solución permanente.
Si finalmente se valida esta técnica como apta para el Ser Humano, se podrá
reprogramar a células propias de un paciente de esquizofrenia y utilizarlas en
él.
Revista Salud y Bienestar
En la esquizofrenia el grupo de
células nerviosas conocidas como el sistema de la dopamina, no funcionan
correctamente produciendo en el paciente hiperactividad trastorno de la cognición,
los movimientos y las emociones. Partiendo de esta situación el Centro de
Ciencias de la Salud de la Universidad de Texas en San Antonio, Estados Unidos,
se planteo reemplazarlas. Los investigadores tomaron muestras de tejido de
fetos de rata y células aisladas del tejido. Las células madre son capaces de
convertirse en tipos diferentes de células, y en este caso se seleccionaron las
interneuronas. Las células fueron inyectadas en el hipocampo del cerebro de
ratas enfermas. El hipocampo regula el sistema de la dopamina y desempeña un
papel importante en el aprendizaje, la memoria, y funciones ejecutivas como la
toma de decisiones. El trasplante restauró en las ratas el funcionamiento
normal del hipocampo y del sistema de la dopamina. A diferencia de lo que
sucede con los enfoques tradicionales para tratar la esquizofrenia, tales como
la administración de medicamentos y la estimulación profunda del cerebro, el
trasplante de interneuronas podría, en teoría, resultar una solución permanente.
Si finalmente se valida esta técnica como apta para el Ser Humano, se podrá
reprogramar a células propias de un paciente de esquizofrenia y utilizarlas en
él.
