Muchos expertos se quejan del abusivo uso de las redes sociales tanto por pequeños como por mayores. Yo no voy a entrar en ese debate. Partiendo de la base que "todo en exceso es malo, incluso lo que en un principio resultaba beneficioso", no puedo argumentar nada más, pero vamos a analizar "el problema".
Las RRSS se "reinventaron" a finales del siglo pasado con el mismo objetivo con el que se inventaron realmente allá por el siglo XIX, cuando un grupo de sociólogos franceses llamados Ferdinand Tönnies y Émile Durkheim, inventaron el "gemeinschaft" y el "gesellschaft" para referirse a lazos sociales personales y directos que vinculan a los individuos con aquellos con quienes comparten valores y creencias (gemeinschaft), o bien como vínculos sociales formales e instrumentales (gesellschaft).
Y ese objetivo del que hemos hablado al principio del párrafo no es otro que el de poner en contacto a las personas con personas. Entonces, Álvaro, ¿para qué escribes este artículo? Porque para mí la gracia está en la segunda característica de las RRSS: "Un fin productivo, emprendedor y positivo". Porque tilizando estas poderosas herramientas podemos desde muy pequeños canalizar nuestro futuro.
¿Qué fines productivos les podemos dar?
- En primer lugar, uno que le entusiasmará especialmente a los desempleados: Encontrar trabajo. Gracias a las RRSS se puede encontrar empleo, incluso en tiempo récord. Como vemos en la imagen, hasta el 90% de las empresas dedican exclusivamente su departamento de empleo a buscar candidatos a través de Internet. ¿A qué estamos esperando? Nos tenemos que anunciar para que nos contraten.
Hay varios puntos que tenemos que tener en cuenta a la hora de encontrar empleo en RRSS:
- Para mí el factor más importante es saber separar el perfil personal del profesional. Por ejemplo, podemos crearnos un perfil profesional que utilicemos como curriculum vitae on-line, es decir, como tarjeta de visita para esas empresas que buscan personal, en mi caso, debido a mi edad, solo cuento con perfiles profesionales en Facebook, Twitter o Linkedin; échales un vistazo.
- También hemos de tener en cuenta los comentarios que hacemos en perfiles ajenos. Las empresas examinan absolutamente todo; debemos tener muchísimo cuidado.
- A la hora de escoger la red social, hay tres que se desmarcan del resto en estos parámetros: Facebook, LinkedIn y Twitter, ya que son las más frecuentadas por las empresas con el fin de reclutar personal, y son las que más se suelen utilizar con un fin profesional, especialmente Linkedln, que es la más especializada de todas. Aunque si queremos redes sin otro fin que el de encontrar trabajo y poner en contacto a profesionales tenemos:
- Freelancer: exclusivamente dedicado a los autónomos. En ella las empresas crean un perfil en el que hacen público los puestos que se ofertan y las características del empleo, pero, al mismo tiempo, los candidatos pueden ofrecerse libremente especificando su formación y experiencia.
- Friendsandjob: Esta plataforma existe como resultado de la iniciativa de un estudiante de la Universidad Rey Juan Carlos de Madrid, que pretende favorecer la inserción laboral de quienes todavía no han finalizado sus estudios. Aunque hace relativamente poco que está en marcha, cada vez cuenta con más corporaciones participantes.
Por último, y lo más importante y por lo que estoy luchando desde mis plataformas, me gustaría hacer mención a otra forma de un uso productivo de las RRSS, especialmente por parte de los más jóvenes, adolescentes y niños. Y no es otra que la mostrar nuestro talento a través de estas. Gracias a ellas tenemos una ventana abierta al mundo para encontrar el apoyo necesario para que nuestro talento o pasión, como la pintura, la música, el baile, el deporte, la literatura, la oratoria, el diseño, el dibujo, la informática en forma de apps, robótica o cualquier hobbie que nos apasione sea conocido. Todo ello lo podemos ir mostrando a través de plataformas tan famosas como blogger, pinterest, wordpress… y que luego nos encargaremos de promocionarlo compartiéndolo en los perfiles que hemos creado. Con esto además conseguimos que los chicos que aún no han descubierto su pasión y están sumergidos en la parte negativa y negra de las redes, prueben nuevas opciones que hasta ahora ni siquiera se habían planteado, y logremos entre todos canalizar el tiempo que invertimos en las garras de las RRSS y caminemos juntos hacia un fin productivo y beneficioso para nuestra realización personal y sobre todo para nuestra salud emocional y mental.
¡HASTA LA PRÓXIMA!
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