Vacaciones de verano para ti…vacaciones de verano para mi…

Hoy comienza oficialmente el verano. La primavera, y como ya hace cada año, cede el testigo a la nueva estación y con ello la responsabilidad de recibir a partir de hoy tantos y tantos comentarios a favor y en contra como: “Es el verano más caluroso desde hace 50 años” o “este verano será recordado por…”. Y es normal que hablemos de esta cálida estación porque para la mayoría resulta la mejor época de todo el año.

Por regla general, excepto aquellos que trabajan en verano, esta época estival está asociada a las vacaciones. Momento deseado durante todo el año para dar rienda suelta a nuestra pasión por el tiempo libre y en el que intentamos hacer algo diferente a lo que hacemos el resto de meses. Son muchas las personas que planean durante los 11 meses restantes del año, qué van a hacer en estos 30 días de asueto.

Reconozco que en esta ocasión me ha pillado un poco desprevenido el verano. Y es que a mí también me gusta planificar las cosas con tiempo, pero con esto de Fukushima, las elecciones, la crisis de los pepinos y, lo más importante, la aparición de la Pantoja en un programa de Telecinco, me he despistado por completo y no sé qué hacer en mis vacaciones.  Y quizá lo lógico es que aprovechara para ir a la playa, pero eso ya es algo que tenemos en Canarias todo el año, así que he hablado con varios amigos para conocer qué harán ellos este verano y de esta forma, sacar ideas que me puedan dar una salida.

Mi amigo Alfredo Minado, tiene pensado ir con su mujer, niños y suegra a pasar el verano al pueblo donde nació su esposa por orden e imposición de la susodicha. Mi otro amigo Salvador de Olivas, vive solo pero ya sus padres le han amenazado con quitarle la asignación que le mantiene si no va con ellos este verano a recoger papas a la finca. Y por último, Gustavo Nito, de profesión ligón, ya se ha apuntado a un crucero de solteras, pero desconozco con qué intención.

Por lo que un año más y como no me gusta ninguna de las alternativas de mis buenos amigos creo que me voy a decantar por quedarme en casita porque, ahora que lo pienso y valoro, con lo que cuestan unas vacaciones y tal como está el patio más vale “arrejuntar”, no sea que de repente te veas en unas “vacaciones permanentes”. Pero lo que sí haré sera, independientemente de que sea o no verano, vivir cada día como si fueran las mejores vacaciones de mi vida, puesto que para ser feliz tampoco hace falta el  dinero.

Esta es la crónica habitual, de un día como otro cualquiera…