Explicaremos a continuación algunas maneras para hacer nuestra calabaza de Halloween.
El primer paso es buscar la calabaza adecuada al tamaño que deseamos. Cuanto más verde mejor, así durará más tiempo y que sea lo más plana en su base como para mantenerse en pie. Si no encontramos ninguna que cumpla este requisito, podemos cortarle un poco la base.
Recomendamos antes de comenzar, limpiar la calabaza con una mezcla de agua y jabón, dejarla secar bien y después limar las posibles asperezas e irregularidades con un papel de lija fino.
Materiales:
-Cuchillo o cutter.
-Una cuchara para vaciar la calabaza.
-Un rotulador para, previo el proceso de esculpir, marcar en la calabaza la silueta de los ojos, boca y demás elementos que desees.
- Velas o linterna de petaca.
Cuando tengamos todo ello, podemos ponernos manos a la obra.
Realización:
-Con el cuchillo afilado y mucho cuidado, cortaremos la tapa superior, reservándola.
- Luego sacaremos las semillas (pipas) y la pulpa de su interior.
-Con la ayuda del rotulador, dibujaremos los ojos en formato de triángulo, y una boca en zigzag.
-Usando el cúter, cortaremos las piezas de la cara por la línea de puntos marcada.
-Para que la calabaza gane un aspecto terrorífico, introduciremos una vela o linterna en el interior.
Recordad que podemos aprovechar los restos del interior de la calabaza para hacer una tarta o mousse de calabaza o para asar al horno sus semillas.
¡Feliz Halloween!