¿Y esa pareja que camina detrás mío? Sitges, octubre '18.
En mi último viaje sola, rumbo a Madrid, me llevé deberes. Elvira Lindo me puso tareas. Anoté en mi libreta durante todo el día la gente que vivió las calles madrileñas a mi paso. Tiene toda la razón cuando afirma que comparten diario con nosotros. Esos desconocidos son parte de la historia, de nuestra historia, del recuerdo que escribiremos agotada la jornada. Porque los miramos, los observamos detenidamente y sonreímos, nos sulfuramos o emocionados con sus movimientos o palabras. Puede que olvidemos sus figuras con el tiempo, tal vez no pensemos en ellos nunca más. Aún así, debemos ser capaces, también, de darles el protagonismo que merecen. Durante unos minutos han centrado nuestra atención, nuestra intención. Durante unos minutos hemos vivido sus vidas, compartido espacio, y tal vez, hasta intercambiado miradas y sonrisas. ¿Por qué hacerles desaparecer tan deprisa? Personajes que actúan ajenos a nuestra persona. Se mueven, conversan y miran sin tener conciencia de nuestros ojos ni de nuestra libreta. ¿Imagináis que alguien escribe sobre vosotros en su diario? ¿Por qué no? Pululamos por la vida sin darnos cuenta de quiénes nos miran a lo largo del día. Vagabundeamos indiferentes a la importancia que quizá hemos significado para algún desconocido, para algún conocido que no nos confiesa que seremos parte de sus líneas, de su libreta. Tal vez llevamos el neón en el que otro se fija y por el que seremos recordados. El azar nos lleva a cruzarnos con ellos, como dice Lindo, para narrar en imágenes todo aquello que no hace falta decir en palabras. Pero, sí, cuenta transcribirlo y así no olvidarlo. ¿Quién se ha cruzado por vuestro lunes?Una pareja, en una tienda de objetos de segunda mano, escoge bolas de bingo con números determinados de una caja repleta. ¿Días importantes para ellos? ¿Números unidos a sus vidas? Yo los fotografío y así se quedan conmigo para siempre. Segovia, agosto '18.