En esta vida el ser perseverante es una excelente cualidad. Mucha gente opina que la separacion entre perseverante y pesado es una linea muy fina. Yo creo que el ser pesado tiene mas que ver con ofrecer algo que no interesa al de enfrente y siempre de la misma forma, mas que con contactar muy a menudo con la misma persona. Sin embargo, lamentablemente, hay muchos productos o servicios que pese a que tienen su publico objetivo y los compran, en realidad no atraen su interes y es realmente dificil diferenciarse. Esto es algo que la honorable y mal vista profesion de vendedores conoce perfectamente.
Es obvio que el secreto de negociar y vender es ofrecer algo que para el cliente valga mas que lo paga o podria obtener de otro proveedor. Sin embargo en multitud de ocasiones no tenemos nada de valor que ofrecer y nos compran por inercia hasta que llega la crisis. Las alternativas claras son mejorar la oferta o cambiar a clientes a los que les aportemos algo. Otras empresas se dedican a completar una gama de productos y/o servicios distribuyendo los de terceros ademas del suyo, lo que da una sensacion de gran incremento de la rentabilidad al no tener que acometer los costes de creacion de producto, I+D+i, produccion... El problema es que si nuestro core business, nuestro valor añadido, se traslada a distribuir productos de terceros, probablemente es que tengamos los pies de barro.