El pasado sábado 17 se septiembre se celebraba el 15º aniversario del “Som com Som”, local emblemático, donde los haya, de ambiente lésbico en Valencia. Al frente de éste evento nuestra apreciada Vicky Cánoves, una mujer luchadora que durante estos largos años se ha mantenido al pie del cañón para ofrecernos a las lesbianas valencianas un hogar de reunión, de encuentro, de recreo, donde cómo en cualquier local de ambiente, podemos ser nosotras sin las miradas de gente que se escandaliza, aún, en los tiempos que corren.
Aquí no se está barajando el hecho de magnificar un guetto, como podría pensar algún que otro detractor, que creen saber que nosotras mismas nos cerramos a la visibilidad y no entiende que, un local de ambiente no es más que un club de encuentro donde compartimos gustos afines o donde simplemente sabemos que en muchos casos, por ejemplo, podemos acercarnos y coquetear con una mujer sin sentir la inseguridad de un rechazo por no tener tendencias sexuales símiles.
Decir que un local de ambiente celebre 15 años de vida es todo un logro en nuestra ciudad y más aún si hablamos de ambiente lésbico en concreto, pues en estos últimos años de mandato del PP en Valencia nos han ido cerrando muchos de estos sitios, sobre todo en el barrio del Carmen, casco antiguo de Valencia, donde se concentraban la mayoría; que no muchos pero los suficientes para disfrutar del ocio de la noche valenciana. Eso y la crisis económica en la que actualmente estamos sumidos ha contribuido a que, hoy por hoy, el único que nos queda en pie sea el Som com Som y no precisamente porque esté a salvo de estas piedras en el camino.
Y aprovechando este artículo, que me atrevo a indicar que es un humilde homenaje a mi apreciada amiga Vicky por su dedicación y afán de superación, cada fin de semana, para agradarnos y/o sorprendernos, quisiera incitar a todas las mujeres que tengan nuestras mismas inquietudes y que quieran pasar un buen rato, a que pasen a visitar este simpático lugar. Y con ello aportar su granito de arena para evitar que en esta gran ciudad que es Valencia nos quedemos sin el último pub de chicas que nos alegra la vida.
Hasta hace unos meses teníamos la posibilidad de elegir dónde queríamos pasar una noche de copas, siempre hablando del ambiente, claro, porque dentro de este mundillo tenemos nuestras preferencias, por estilos de música, por edades. El cierre de “El Mós d’Eva”, en mi opinión un local para las lesbianas más jóvenes asiduas a la música comercial y petarda, las dejó desahuciadas en las noches de diversión por la ciudad. En cambio el “Som” se diferencia por ofrecer gran variedad en su música, puedes encontrarte con una noche Chill Out, una noche House, o incluso una noche Flamenca. Y la gente es muy variopinta, se entremezclan señoras de 60 años (de las cuales trataremos en otro artículo pues requieren de una gran atención) con chicas de 18 recién salidas del huevo. En resumen, se podría decir que siendo el único es notable en un ámbito de ante todo respeto y saber estar.
Redactado por Kissi Peralta