El castigo siempre llega
Título original: True Grit
Autor: Charles Portis
Debolsillo
ISBN: 978-84-9908-733-7
SINOPSIS
Dicen que no se puede saber qué anida en el corazón de un hombre.
En un viaje para comprar caballos, Frank Ross es asesinado por uno de sus trabajadores para quedarse con una montura, ciento cincuenta dólares y dis piezas de oro.
Con catorce años, Mattie, la hija de Ross, está dispuesta a vengar una muerte que ha quedado impune y a reclamar el cuerpo de su padre. Recurrirá al comisario más «implacable y cruel» de Arkansas, el tuerto Rooster Cogburn. Se adentrará en el Territorio Indio si es necesario. Luchará contra cualquier forajido. Porque Mattie quiere demostrar que el suyo es un corazón noble. Y que su valor es de ley.
Valor de ley es un clásico americano ambientado en el Oeste, una novela amada por generaciones de lectores desde su publicación en 1968 y la fuente de inspiración de dos películas formidables. Un libro tan delicioso como impactante sobre la crueldad, la venganza y la ineludible entrada a la vida adulta. Y un ejemplo de coraje y vitalidad indestructible, como su conmovedora protagonista.
OPINION DE BELÉN MÁRQUEZ
Dejando a un lado las películas diremos que Valor de ley es una novelita corta, entretenida y bastante simplona.
A lo largo de sus escasas 200 páginas, Mattie Ross nos cuenta cómo vengó la muerte de su padre, asesinado a manos de Tom Chaney, uno de sus trabajadores. Mattie viaja hasta Fort Smith para reclamar el cadáver de su padre. Una vez allí, decide contratar al comisario Rooster Cogburn para que le ayude a atrapar al asesino de su padre. A ellos se les unirá un ranger de Texas que lleva ya tiempo persiguiendo a Chaney.
Cuando cogí este libro esperaba encontrar algo más denso. Me sorprendí muchísimo al ver que sólo tenía 200 páginas. La historia está contada en primera persona y se ciñe estrictamente a lo que su personaje nos quiere contar; no hay excesivas descripciones, algo que a veces se hecha en falta —sobre todo si has visionado la película y deseas esclarecer pequeños detalles como en qué ojo lleva Rooster el parche—, pero que no son necesarias. Es un libro muy fácil de leer, perfecto para aquellos que no disponen de mucho tiempo libre o para aquellos que se inician en la lectura y les asusta según que voluminosos libros.
La historia sigue un guión muy definido, sin sorpresas inesperadas, ni tramas paralelas, ni finales sorprendentes. Simplemente es una aventura del Oeste de la que pueden disfrutar tanto jóvenes como avezados lectores.