Revista España
Como muchos de vosotros sabréis Bilbao no existía en el mapa hasta que pusieron el Guggenheim. Nombre impronunciable para muchos foráneos y, por supuesto, lugar de peregrinaje obligado para todos aquellos que vienen a visitarnos y, claro, a los que vivimos aquí pues nos toca acompañarles. Creo que en alguna ocasión ya os lo he comentado, pero mi concepto del arte moderno es un poco particular. Hay cosas que no entiendo y que creo me están tomando el pelo. No logro ver "lo que el artista quería transmitir cuando pintó una raya sobre un lienzo blanco". ¿??¿? En mi primera visita al Guggenheim no tengo por olvidar un cubo de cristal con "la habitación desordenada", no digo yo que no fuese arte pero, vamos, que cualquier casa con adolescentes tiene semejante "obra". Desde luego no meto a todos en el mismo saco, eh¡¡, hay un montón de obras maravillosas y muy bonitas que merece visitar en el Guggen aunque yo le tenga más cariño al Bellas Artes (menos famoso pero, en mi opinión, más entrañable). Sirva este rollo para contaros ahora que os recomiendo ir al Guggenheim. Si, je je...¡¡ no me he vuelto loca ¡¡ Leo en El Correo que se organiza una exposición de " la edad de oro de la pintura holandesa y flamenca". ¡¡Me encantan este estilo de cuadros ¡¡. Estará hasta el 23 de enero de 2001, así que no será por falta de tiempo. Os la recomiendo y espero que os guste.