Revista Infancia
Hace unos días escribí un post contándoos que atravesaba un momento bajo en relación a la crianza de David y que me surgían muchas dudas respecto a si lo estaba haciendo bien o no (si quereis leerlo pinchad aquí).
Afortunadamente, parece que mi pequeñin me hubiera leido y, a partir del momento en el que escribí el post, su actitud ha empezado a cambiar de manera considerable. Y no me refiero con el tema de los gritos o las rabietas que, como todas sabemos, son cosas bastante comunes y que van y vienen, sino que me refiero a un cambio mas profundo y en varias facetas...
Por un lado estaba mi preocupación respecto a los supuestos problemas de socialización de mi pequeñin.
Cuando escribí el post David se encontraba en su peor momento en relación a este tema...parecía que le asustaba todo el mundo, incluso muchas veces lloraba si la persona en cuestión no se iba. Pero esa misma noche, vinieron de visita su tío (con quien nunca ha hecho demasiadas migas) y su primo y, tras un primer momento de esconderse y decir "no pasa nada" (ese suele ser el principio del fin) se relajó y jugó con ellos en su habitación, incluso les dió un besito al despedirse, cosa que hasta ahora no había hecho nunca.
Lo de los besos ha ido en aumento y ha llegado a permitir que un vecino y una señora en el parque de bolas le dieran un besito. Por cierto...para el dar un besito es poner la carita para que tú se lo des!!
Y el colmo fué ayer cuando, estando en casa de mis padres (yo no estaba pero me lo contó mi madre), fueron de visita una prima mía con su marido y su hija. David solo los ha visto un par de veces en su vida y siempre les ha ignorado y ha querido que nos fueramos, pero ayer fue diferente. No solo toleró perfectamente la visita, sino que, además, no paró de darle abrazos al marido de mi prima. A la nena y a ella no les hizo tanto caso, pero las aceptó perfectamente dejando que se la acercaran, incluso que mi prima lo cogiera en bracitos. Y por lo visto estuvo graciosísimo, cantandoles y bailandoles todo lo que sabía!!
Parece que mi niño empieza a perder ese rechazo hacia la gente...no sabeis cuanto me alegra!!! sé que esto es una montaña rusa y que posiblemente algunos días estará receptivo y otros rechazará cualquier interacción, pero, por su manera de comportarse, creo que, en este tema, algo está cambiando y para bien.
Por otro lado estoy muy satisfecha con el tema de la alimentación...ha pasado de no comer casi de nada a comer cositas de todos los grupos de alimentos. No tolera toda la fruta, pero se come muy a gustito el caqui, la pera y el zumo de naranja, no le gustan todas las verduras, pero se toma un plato razonable de crema de verduras y le gustan las berenjenas rebozadas. Por fin admite el huevo, aunque de momento solo en forma de tortilla y por fin come algo de pescado, aunque hasta la fecha solo sea merluza rebozada con huevo. Y ha descubierto el chocolate...y le vuelve loco!!!
Esta pasada semana ha sido una semana llena de emociones intensas y de cambios. Pero en lo que a David se refiere, empiezo esta nueva semana mucho más optimista y tranquila. Y tremendamente orgullosa de como va creciendo mi pequeño.