La verdad es que admiró mucho a este autor por sus libros, pero es que a veces no entiendo como alguien tan culto como él (asumo que es culto pues en su obra no se puede apreciar lo contrario) tenga capacidad para hablar de manera tan pedante e insultar sin ningún escrúpulo.
De hecho me sorprende que en sus recientes publicaciones que tienen que ver con la muerte de Chávez, se haya contenido un poco, no me hubiera sorprendido que arremetiera con todo, incluso faltando el respeto al reciente fallecido.
El escritor y su relación con la política me parece una combinación muy extraña, una mente brillante y a la vez un criterio que bien podría rivalizar con el de un niño de 6 años, por la cantidad de bravuconadas que suelen salir de su enorme boca. A mi parecer de respeto no ha aprendido nada y nada de respeto merece, a menos bueno el respeto que se le debe tener a una persona de la tercera edad.
Me recuerda al célebre alcalde de mi ciudad Santa Cruz de la Sierra, aunque en desagravio del burgomaestre, él es mucho mas divertido que Vargas Llosa. Hablando sin medida, atropellando la palabra, a mí se me ocurre que el señor cree que sabe demasiado y se cree dueño de la verdad, para colmo recibe el premio nobel de literatura, acrecentando su ego y otorgando al escritor un pretexto de superioridad.
La opinión de la gente es importante, tiene derecho de escribir y decir lo que le dé la gana, al igual que yo o cualquier otro, pero para alguien de tal relevancia, señor me parece que se excede en demasía.