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La última visita antes de que anocheciese fue el Palacio de la Cultura y la Ciencia, en el distrito financiero. Aunque parece ser que a los vecinos de Varsovia nos les gusta este gran edificio, a mí me encantó. Tanto su exterior, como su sorprendente interior y mucho más por las vistas que ofrece desde la terraza mirador situada en el piso 30º. Se compran las entradas en el hall y luego toca hacer cola para uno de los dos ascensores que te suben hasta los 115 m.
Nos recordó un poco a la Torre Montparnasse de París, que los parisinos odian y que los turistas amamos por las estupendas vistas que ofrece.










