Me gusta ir de compras. Es más, hubo una época en mi vida que hubiese encajado perfectamente en el perfil de compradora compulsiva. Para ser exactos era la época en que era delgada y joven, así que podía comprar cualquier cosa en cualquier tienda porque no parecía un chorizo.
Pero claro, hablo de la prehistoria, de esa época en que si querías comprar algo tenías que desplazarte hasta la tienda y rebuscar entre los colgadores. Porque sí existía la compra por catálogo y empezaba tímidamente la tele-tienda, pero era poca la gente que se fiaba de comprar algo que no veía y más aún de pagar algo sin tenerlo en las manos.
Pero los tiempos avanzaron rápidamente y ahora vivimos de lleno en la era digital. Y con esta era ha llegado lo que, para mí, es la panacea: las tiendas online. Para mí, uno de los mejores inventos de la humanidad.
Empecé comprando en Amazon USA cuando la gente creía que por poner tu número de tarjeta de crédito en Internet, a los dos minutos te habían vaciado la cuenta (como yo tampoco tenía mucho que vaciar, supongo que por eso nunca le di demasiada importancia). Pero claro, como soy bastante raruna con algunos tipos de música que me gustan, pues sólo los encontraba allí, así que me lancé de cabeza a ir comprando.
Luego, poco a poco, se fueron abriendo tiendas online en España, hasta llegar a hoy día en que puedes comprar todo lo que puedas imaginar. Así que, a excepción de la comida, compro muchas cosas online. Y he probado ya unas cuantas tiendas, de diversas cosas, en diversos sitios.
Por eso decidí crear la sección “De compras”, para poder recopilar esas webs en las que he comprado y he tenido tanto buenas como malas experiencias. Lo hago para tener un listado y, de paso, lo comparto con vosotr@s por si os sirve de algo.
Ah! Y admito sugerencias. Eso sí, siempre y cuando sean experiencias reales. ¿¿Porque de qué sirve recomendar o descartar algo que no has probado??