CAROLA CHÁVEZ
En su vana tendencia al borrón y cuenta nueva, el candidato globotizante, previa sobredosis de Alka Seltzer, nos dice Chávez sí era bueno En su vana tendencia al borrón y cuenta nueva, el candidato globotizante, previa sobredosis de Alka Seltzer, nos dice Chávez sí era bueno, que nada fue culpechavez, que, ooootra vez, como que éramos felices y no lo sabíamos, o sea. No era culpechavez, descanse en paz, en la paz del olvido, porfa plis, porque está muerto como queríamos, como se lo pedimos fervorosamente a la Virgen Dorada de la Plaza de Altamira; y nadie se los puede devolver. -Perdonen que no pueda reprimir mi sonrisa al pronunciar estas palabras, pero es que nosotros no creemos en la represión. Abran los ojos, chaburros resentidos -perdón-, pueblo querido, pero no miren atrás; bueno miren, pero sólo un poquito, de ladito, así, a la izquierda porque el pasado sólo tiene izquierda y ese es el que vamos a recordar, como se recuerdan las cosas, decente-y-pensantemente, a conveniencia propia, es decir, a conveniencia nuestra, en fin: permítanos pensar por usted. Usted lo vio en Globovisión, y si no lo vio, ahora lo verá: Chávez regañaba a Maduro y no sólo a él sino a Diosdado, a Elías, a todos esos malucos que tenía cerca. Los regañaba porque ellos no sirven para nada. No me vengan con eso de que Chávez y los chavistas son autocríticos y exigentes, nada de eso, eran regaños, porque este gobierno no ha hecho nada, culpemaduro, aunque nosotros nos comprometemos a preservar las misiones y esas cosas que llaman logros, aunque éstos no existan, of course. Créanme, ustedes no vieron a Nicolás ni al equipo de gobierno batallando contra nuestra miseria -excuse me- nuestra lucha por la libertad. No vieron sus días de 35 horas sin noches trabajando al lado del Presidente; no vieron cuando él, tantas veces, más veces que cualquier regaño, agradeció sus esfuerzos, sus logros, su apoyo. No vieron cómo los mantuvo a su lado; y sobre todo no vieron cuando Chávez, antes de partir a La Habana -guácalas-, dijo que, si algo le pasaba, ante una nueva elección, él opinaba que el mejor candidato es Nicolás. Y si lo vieron, piensen entonces que Chávez era idiota, porque sólo un idiota propone como candidato a un chofer de autobús. No sean necios, dejen ya a ese hombre descansar en paz, hagan como nosotros con Bolívar, arrúmenlo en el baño, y salgan a votar por mí. carolachavez.wordpress.comRevista América Latina
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