La crisis energética que enfrenta Cuba en este momento ha causado no solo racionamiento eléctrico para el sector empresarial, sino también un reajuste de las rutas de transporte público.
Muchos cubanos se quejan de que los autobuses están defectuosos y sucios, también que han disminuido sus frecuencias.
El colapso del transporte público no solo tiene que ver con el tema del combustible, también es responsabilidad de la ofensiva contra los conductores de taxis compartidos, llamados almendrones. Desde hace meses el acoso a estos cuentapropistan ha provocado que muchos hayan entregado sus licencias, sobrecargando así los autobuses.
Yusnaby Post recogió las opiniones de algunos cubanos en las calles de La Habana.