Ven, qué esto es gratis

  Hoy mucha gente se queja de que Facebook solo funciona si inviertes en publicidad, pero piénsalo fríamente, Está inmensa red social es un negocio como cualquier otro, que busca obtener un beneficio por su actividad y aún así, está plataforma ya ha hecho mucho por la humanidad, cambios positivos y otros más desafortunados.  Cosas buenas: estrechar la brecha digital, conectar a miles de personas que permanecían desconectadas las unas de las otras y democratizar la visibilidad y la atención. Entre otras. Cosas malas: te aparta de hacer el trabajo que realmente importa, es una máquina de ego, centra toda tu atención en likes, shares y comentarios y crea confusión entre comparación y autoestima. Ahora resulta que Instagram, Twitter y Pinterest son más interesantes ¿Por qué son gratis? ¿Seguro? 

Cualquier acción o trabajo que merezca la pena incurre algún tipo de coste, tiempo, personal, creatividad, artes gráficas, desarrollo web y $$$ para publicidad. Llegar exactamente al punto que tu buscas se necesita una grandiosa dosis de creatividad, perspicacia e instinto, aplicados al uso de la web social (incluye herramientas, plataformas y soportes) y eso significa una cantidad importante de trabajo implacable, lo que a su misma vez supone tiempo y esfuerzo y esto también tiene un precio.

Dime cuantas horas has invertido en tu página de negocio en Facebook, en idear, crear, subir y mover vídeos en tu canal de Youtube. En actualizar tu perfil de LinkedIn, conectar, participar en debate o recomendar. Cuanto tiempo invertido en lanzar más de los 20.000 tweets que tienes, responder menciones y hacer RT o en crear contenidos relevantes, frescos y “off topic” para tu blog. Conoce con exactitud todo esto y te darás cuenta de que el precio ya lo habías pagado mucho antes de que te dieras cuenta.