El mercado automotor se desploma. En los dos primeros meses del año la venta de automóviles nuevos retrocedió 88,7%, de acuerdo a los datos de la Cámara Automotriz de Venezuela (Cavenez).
El reporte mensual del gremio muestra que entre enero y febrero de este año apenas se comercializaron 1.539 autos, esto es, 12.061 unidades menos que en igual lapso de 2013.
Si sólo se compara el rendimiento de febrero el declive es de 89,9%. El mes pasado las automotrices apenas colocaron en el mercado 817 vehículos, mientras que en febrero del año pasado se vendieron 8.058 cero kilómetros.
De ese total vendido en febrero, 811 carros fueron ensamblados en el país y sólo seis eran importados. Las cifras confirman la grave situación que atraviesa el sector.
Por un lado, las ensambladoras instaladas en el país producen al mínimo o algunas, como Toyota de Venezuela, han paralizado indefinidamente sus operaciones tras agotar el material de ensamblaje. Otras como Ford Motor realizan labores de producción sólo tres días a la semana para dosificar el poco inventario que tienen y evitar una paralización forzosa.
El reporte de Cavenez indica que en los primeros dos meses del año MMC Automotriz vendió 590 autos, Toyota de Venezuela 538, General Motors 91, Chrysler 12 y Ford Motor apenas 3 vehículos. Iveco ha comercializado 85 unidades y Mack de Venezuela 21 camiones.
Esas siete ensambladoras privadas agrupadas en Cavenez adeudan a sus casas matrices alrededor de 1,8 millardos de dólares. El pago de la deuda permitiría reanudar los despachos de mercancía hacia Venezuela, pero hasta ahora las automotrices no han recibido una propuesta concreta de pago por parte del Ejecutivo nacional.
Los importadores de vehículos están en una situación complicada porque el Ejecutivo nacional prácticamente cerró las importaciones al restringir la emisión de las licencias requeridas para traer los vehículos desde el exterior.
Al detallar el reporte de Cavenez se observa que en los dos primeros meses del año apenas se han comercializado 20 unidades importadas, un 99,7% menos que los 7.465 carros importados comercializados en el mismo lapso de 2013.
El informe de Cavenez revela que los distribuidores de marcas como Fiat, Nissan o Renault no han comercializado carros en 2014.
Desde 2009 el Gobierno nacional inició la restricción de las importaciones. Ese año el ministro de Comercio, Eduardo Samán, dijo que las divisas que obtenía el país por la venta de petróleo no podían "quemarse" en la importación de vehículos.
Aunque se pensaba que sería una medida coyuntural por la caída de los precios del petróleo, la medida se convirtió en una política hacia el sector.
A partir de 2009 se limitó la entrada de autos importados y en la mayoría de los casos las licencias que aprobó el Ejecutivo nacional fueron en el marco de convenios comerciales con países aliados como Argentina, Uruguay, Ecuador, Rusia o China.